Existe una línea bastante gruesa que separa el decir del aceptar.
Para TaeHyung, haber dicho en su cabeza que le gustaban los hombres más allá de la admiración propia del modelo humano, fue mucho más fácil que realmente aceptarse como un chico que gusta de otro, especialmente de su mejor amigo. En aquel momento parecía una idea capaz de acoplarse con naturalidad, pero para alguien que ha pasado más de quince años demostrando lo contrario, definitivamente no es algo así de sencillo.
Le gustan los hombres, repite cuántas veces puede luego de la sesión de besos que Jimin fue amable en otorgarle. Ríe con las lágrimas cayendo a borbotones cuando la noche se cierne sobre sí y piensa que es imposible para él aceptarse como alguien que también imagina a un hombre a su lado en el futuro.
¿Así debía sentirse todo? ¿Las voces en su cabeza podían ser tan fuertes? ¿Por qué todas las palabras de rechazo que le atormentaban salían de su propia boca?
Si iba a sentirse de esa manera para siempre, preferiría nunca volverse a enamorar.
—Jodida mierda...
...
Llega al salón con kilos de corrector para ojeras encima, demasiado cansado como para disimular el horrible retorcijón que amarra sus tripas apenas sus ojos vagan por el salón en busca de JungKook, sabiendo que los latidos descontrolados que sonrojan sus mejillas no son más que un estúpido recordatorio de la forma incorrecta en la que debería querer a su amigo.
JungKook sonríe junto al chico que se sienta a su lado ese día, regalándole expresiones que serían ilegales si TaeHyung pudiese volverlas un crimen contra la estabilidad emocional de las personas.
—Puto asco —murmura con los dientes apretados, ignorando la mirada angustiada que le lanza el castaño. Sigue su camino hacia su nuevo compañero de banca, concentrándose en la esplendorosa hilera de dientes blancos que BoGum le da como saludo, ignorante del lío personal que agobia a TaeHyung.
Es vergonzoso darse cuenta de que siempre vio a JungKook como más que un amigo, menos que un amante. La parte más difícil de enamorarse de su mejor amigo (además de la implicación de la palabra) son las experiencias que los unen. Horrorosas y vergonzosas al mismo nivel. TaeHyung puede recordar el día en que JungKook perdió su primer diente de leche y la emoción que brillaba en sus redondos ojitos al trazar un plan para quedarse despierto durante toda la noche y atrapar al ratón de los dientes. También la primera declaración amorosa del castañito que terminó en moretones por parte del novio de la susodicha y un par de risas rotas al verse con el corazón roto. O aquel día cuando los sueños húmedos marcaron la pubertad del mocoso que dormía con peluches de conejos y almohadas de Hatsune Miku. Ha compartido cada experiencia de JungKook como propia.
Menos enamorarse el uno del otro.
—Te ves terrible. —Probablemente no sea la mejor forma para saludar a alguien, pero BoGum se caracteriza por su personalidad ocasionalmente extraña y el dramatismo propio de un miembro del club de teatro. Sus pestañas revolotean contra sus mejillas mientras se reclina hacia atrás y escudriña al pelirrojo.
TaeHyung sonríe, más falso que maniquí en bahía.
—Buen día para ti también.
—Gracias —dijo—, ¿ya mencioné que te ves terrible?
—Creo haberte escuchado la primera vez, Bo.
— ¿Sí? —Riendo, se hizo a un lado para que su nuevo compañero tomara asiento, girándose inmediatamente hasta que sus rostros quedaron a centímetros de distancia—. De cerca es incluso peor, Tae. ¿No te quieren mucho en tu casa, verdad?
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Los amigos no hacen eso ✦ KookV
FanfictionTaeHyung puede estar un poquito enamorado de JungKook, quizá el mínimo porcentaje posible para alguien casi heterosexual hasta la médula, después de todo, los amigos no hacen lo que ellos hicieron... ¿Verdad? ⊱⋅ ──────────── ✦ Copyright © 2017 SHXGL...