WHERE YOU GO I WILL GO | Alexa Grimes; buena madre, hermana y tía. Pero, ¿buena sobreviviente?
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Donde en el mundo reina el caos, donde los muertos cobran vida y la gente se despedaza entre sí. Alexa debe sobrevivir cuanto más pueda y pode...
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ALEXA
Ibamos en la patrulla de nuestro trabajo, cuando esta misma se queda sin gasolina.
Maldición
No nos quedó otra que bajarmos del vehículo y seguir nuestro camino a pie.
Minutos después encontramos lo que al parecer fue una granja, entramos, pedimos ayuda, pero al mirar por una ventana los vimos a todos muertos.
En la granja había un caballo, así que emprendimos camino cabalgando.
Estabamos cabalgando en la ciudad de Atlanta cuando veo un helicóptero pasar detrás de un edificio.
—¿Lo has visto?, al helicóptero —dijo mi hermano por lo bajo.
—Si, lo ví, sigamoslo.
Necesitabamos respuestas a todo lo que estaba pasando y quizás ese helicóptero podría resolver alguna de nuestras dudas, ahora, existenciales.
Aceleramos el paso, siguiendo al helicóptero cuando en ese momento empezaron a salir caminantes de todos lados < Estamos fritos >, pensé.
Caemos del caballo, junto a nuestra bolsa de armas y nuestros sombreros, suelto un leve quejido por el golpe de la caída.
Nos incorporamos rápidamente y nos metemos debajo de un tanque, sin tener la oportunidad de tomar nuestras cosas. Observo a nuestro al rededor en busca de una salida de ese tanque y veo una trampilla para entrar dentro de este. Me apresuro en abrirla y empujar a mi hermano para que entre primero, al estar dentro me permito volver a respirar.
Hay un caminante muerto... más bien rematado, dentro de el tanque; oh bueno eso es lo que pensaba, ya que se abalanzó a Rick, todo pasó demasiado rápido y él le disparó en la cabeza.
Quedamos aturdidos debido al ensordecedor senido rebotar por las paredes del tanque. Rick abrió la compuerta de arriba en un intento de despabilarse, muy mala idea ya que los caminantes se empezaron a acercar.
—Mierda.
Cerró la compuerta, nos dedicamos a esperar unos minutos, relajando nuestros cuerpos que estaban tan tensos, cuando oímos una voz.
—Hola... hola, ustedes los del tanque— se escucha una voz por el comunicador.
Rick se acerca rápidamente y se apresura a contestar por el aparato.