SOMEDAY I'LL GET (Algún día te conseguiré)

VI

-Linda - abrí mis ojos pesados y vi a mi hermana  con una sonrisa en la cara acercandose a la cama- ¿Estás mejor?

-Si, ¿Ashley sabes donde esta..?

-¿Josh? se ha ido hace un rato.

No me importaba. O tal vez si, no lo sabía, aún no. Tendría que haber sido por el golpe en la cabeza o por la emoción del momento pero estaba loca, había dormido con él y sinceramente había sido el único día en aquella casa que lo había echo bien. No pensaba hacer nada más con el ni mucho menos, sólo le necesitaba en ese momento,  a mi lado, de alguna manera protegiendome de los monstruos que viven dentro de mi. La barrera que había entre nosotros estaba empezando a desaparecer y eso me daba miedo, más bien terror,  sabía que le iba a dar todo de mi y si el no me correspondía me quedaría vacía, muerta por dentro.

- Linda, creo que Josh es bueno para ti el no es como..- se quedó callada. Sabía perfectamente de quien hablaba, Noram: el fue el amor de mi vida, cada día a su lado era un día mas de felicidad , hasta que encontró  a alguien mejor que yo. Le di todo lo que podía, todo de mi, solo para que se quedará a mi lado y aún así no fue suficiente. Nunca superé lo nuestro y desde nuestra relación no  decidí comenzar otra, solo pensaba en él. Si no es con él,  no es con nadie me lo repetía a mi misma intentando que fuera verdad pero al final le olvidé y si me preguntarán que si todavía le quiero, no sabría que contestar.

-No quiero hablar  de eso ahora, ¿mamá a venido ya?

- Dijo que se quedaría  todo el día,  tenía una reunión muy importante- me incorporé y me levanté de la cama,  me dolía mucho detrás de la cabeza y necesitaba una ducha, estaba cansada y seguramente me quedaría en casa.

-Vale, pues vete a preparar para el instituto, yo me quedaré en casa aún me duele la cabeza y tengo que descansar

- Hoy vendré tarde a casa, a si que no me esperes para cenar.

- ¿A donde vas?

- Voy a cenar con Jennifer.

- No llegues muy tarde, de acuerdo.- Asintió y se fue sonriendo de mi habitación. Me metí en el baño y me miré en el espejo: tenía ojeras, estaba pálida y llevaba la misma ropa de ayer, no me veía muy bien la verdad. Me quité la ropa y vi que tenía arañazos en los codos, seguramente causados por la caída del día anterior. Llené la bañera y me metí despacio hasta estar totalmente rodeada de agua,  metí la cabeza y abrí los ojos ya dentro, me encantaba esa sensación,  era algo que hacía cuando me sentía mal o estaba deprimida, me escocían un poco las heridas pero por lo demás podría estar allí para siempre. Después de un rato empece a enjabornarme y lavarme con mucho cuidado el pelo.

- Linda, me voy ya.- oí la puerta cerrarse, hoy estaría todo el día sola en casa.

Salí del baño y  me puse una camiseta ancha y unos pantalones desgastados cortos que solía ponerme para dormir, me dejé el pelo suelto para que se secará  y bajé a la cocina. Tenía que comer algo si no quería desmayarne de nuevo o morirme por desnutrición. Me preparé unas tortitas y me tumbe en el sofá dispuesta a estar todo el día viendo películas pero después de comer me quedé dormida, estaba muy cansada.

Un fuerte ruido hace que me despierte, RINGGGG, era el timbre. Me levanté y fui hacía la puerta, RINGGG.

-Ya voy- grité acelerando mi paso, ¿quién sería?, abrí rápido la puerta y le vi enfrente mia, con una sonrisa en la cara, Louis.

-¿Qué haces aquí? - ¿estaba soñando todavía?

-Solo quería hacerte una visita, ver como estabas después de lo de ayer. Iba a ir a verte al hospital pero estabas muy bien acompañada- mi corazón dio un vuelco al escuchar esas palabras- ¿ Me vas a invitar o te vas a quedar ahí mirando?-  su sonrisa se agradó al ver que seguía quieta sin decir nada.

-Claro, pasa.- Me quité de la puerta y paso al lado mia,  dirigiendose al salón.  Me senté a su lado, un poco alejada.

-¿Entonces que tal tu cabeza?

-Bien, por ahora me recupero rápido. ¿Por cierto como sabes donde vivo?

-Se lo pregunté a Laurent. ¿Has comido?- negué con la cabeza y sacó de su mochila el movil, tecleo algunos numeros y antes de que pudiese pedir algo le cogí el movil y colgué.

-No hace falta, de verdad- Le devolví el movil  y le sonreí

-No puedo dejar que te pase lo de ayer- ¿se preocupaba por mi?- y que venga otro a quitarme  a mi chica.- Claro que no, era Louis, ¿que esperaba?

- ¿Tu chica?

Soltó una gran carcajada y me miró,  ahora serio.

-Oye Linda, ¿te puedo preguntar una cosa?- moví la cabeza y continuó- ¿Por qué no me besaste el otro día? - se acercó un poco más a mi, no sabía que decir me había pillado desprevenida.

-Louis..

- ¿Si?

- ¿Haces lo mismo con todas? - se empezó a reir y me miró a los ojos

- Si, pero suelen caer -  me rozó la pierna y la quité inmediatamente- no pueden resistirse.

- No soy como las demás .

- Eso dicen todas- me acerqué a él.

- Podría besarte ahora mismo- se lo susurré lo más lento y suave posible.

- Hazlo- su mano se deslizó por mi espalda haciendo que me acercará más a el, me aproximé a su boca y sonreí, estaba mirando mis labios y solo nos separaban algunos centímetros.

-No. lo haré- Me levanté del sofa y me dirigí hacia la puerta, subiendo el tono- y ahora si eso era todo, te agradecería que me dejaras descansar. - Sonrió picaramente y se acercó a mi.

- Recuerda que a este juego pueden jugar dos.- Dijo mientras salía de mi casa y se alejaba hasta una moto, se subió en ella y antes de que se alejará gritó- Te conqistaré , sea como sea.

Cerré la puerta y me tumbé de nuevo, ese chico estaba loco.  Me reí sola al pensar en él, no era para nada romántico pero había algo en el que me atraía y eso era realmente malo.

***

Me comí una pizza y me fui a mi habitación, empezaba a ser tarde y el día se me había pasado muy rápido, en casa faltaba mi hermana. Me quedé en mi cama escuchando música intentando relajarme y después de una hora oí un ruido en la planta de abajo.

-Te dije que no llegarás muy tarde.

- Linda porfavor no me agobies ¿vale?, se cuidarme solita.- cerró la puerta con brutalidad y se encerró en su habitación,  no sabía que hacer con ella. Entré en la habitación y me tumbe de nuevo, me empezaba a doler de nuevo la cabeza y no quería discutir. Me iba a dormir de nuevo tenía que descansar, al día siguiente iría ya a clase. De repente oí un ruido en la ventana, estaban tirando piedras, la abrí  y vi a Louise  sonriendo debajo de ella.

- ¿Ahora vas de romántico?- dije sonriendo.

- Solo quería avisarte de que mañana vendrás conmigo a cenar, invito yo.

- ¿Y si te digo que no?

- Tendré que raptarte.- me reí y le volví a mirar.

- Me lo pensaré.

- ¿Eso es un si?

- Es un tal vez

- Sería un gran honor llevarla a pasar una noche perfecta.- hizo una reverencia y sonrió mirandome.

- Acepto.

- No te arrepentirás

- Te espero aquí a las ocho, estate puntual.

- Siempre lo soy.

Me metí de nuevo en mi cuarto y cerré la ventana dejando escapar un pequeño suspiro,  me tumbé mientras cerraba los ojos.No iba a ser una cita sólo sería una cena sin más,  sin sentimientos ni ataduras, solo una cena. 

Louise.