Julio

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- ¡Nicole, saca tus maletas!

- Ya voy mamá... - había terminado mi primer año de instituto y ya por fin estaba de vacaciones, me iba a un campamento en Carolina del Norte a pasar todo el verano allí. Estaba bastante nerviosa, pero quería conocer gente y hacer nuevas amistades allí.

Me despedí de mis padres y me monté en aquel bus que estaba esperando frente a mi casa. Vaya. Allí había gente de todo tipo y no sabía donde sentarme, pero pensé que estaría bien hacer algún amigo antes de llegar al campamento y así ya sabría por lo menos con quien estar.

- Hey, ¿quieres sentarte? - oí una voz que pasó por detrás mío mientras caminaba por el pasillo del bus. Me giré y había una chica sentada sola, sin compañía.

- Si, claro - dije con voz nerviosa.

- Soy Sophie, encantada.

- Nicole - y sonreí.

Mientras tanto por detrás de nuestros asientos se oyeron unas risas y de repente escuché mi nombre.

- ¡Hey Nicole! - gritó una voz por detrás.

Me giré y pude ver un grupo de chicos y entre ellos, el que me había llamado, un chico moreno de ojos azules.

- ¡Hola preciosa! - me volví a girar y le puse cara de asco - es de mala educación no responder cuando te saludan, ¿lo sabías? - Sophie y yo nos giramos y luego nos miramos.

- ¿Sabes quién es ese? - dije en voz baja para que no me escuchase - Ni idea, pero tiene pinta de capullo, ni le mires - asentí con la cabeza y me puse los cascos para escuchar música y así poder disimular.

Entonces noté como alguien se acercaba a mi. Era él. Ese capullo que me saludó. Me apartó un casco de mi oreja y susurró - preciosa - rodé los ojos y me giré para mirarle.

- ¿Se puede saber que quieres?

- Vaya modales, eres toda una fiera preciosa, soy Nash, por cierto.

- Muy bien Nash, ahora ¿podrías dejarme en paz? Gracias.

- ¿y si no me voy, que me vas a hacer?

- Déjala en paz, vete - me defendió Sophie.

- Vaya pero si parece que todo este campamento está lleno de preciosas malhumoradas...

- Malhumoradas solo contigo capullo - le dijo Sophie casi gritándole y con rabia - Así que vete, largo.

- Venga, pero si solo estaba charlando un rato con esta preciosidad, ¿verdad Nicole? - dijo mientras me tocaba un mechón de pelo, y le aparté.

- Déjame en paz, tú y yo no estábamos charlando de nada.

Se levantó protestando y se fue al asiento de detrás.

- No te librarás de mí tan fácil preciosa - volví a rodar los ojos.

- No le hagas ni caso Nicole, es un cabrón, ni le dirijas la palabra.

Asentí y me volví a poner los cascos para seguir escuchando música. Mientras miraba por la ventana, sonaba "Say Something" de "A great big world" con Christina Aguilera y mientras veía el paisaje sonreía, hasta que finalmente me quedé dormida.

Cuando llegamos, me instalé en la habitación con Sophie y un par de chicas más.

- Hola, yo soy Amanda y ella es Melanie.

- Yo soy Nicole, y ella es Sophie - y saludamos las dos.

Cuando terminamos de deshacer las maletas, ya era de noche y teníamos que ir a la fiesta de bienvenida. Fui con Sophie y las otras dos chicas y nos juntamos con un grupo de chicos que parecían simpáticos. Aquella fiesta estaba bien, había música y bebida, que más se podía pedir en un campamento de verano.

De repente, mientras bailaba con mis nuevos amigos, alguien me tocó el hombro y me susurró algo al oído.

- Te dije que no te ibas a librar fácilmente de mí - mierda, era él de nuevo. Rodé los ojos - ¿Qué pasa, todavía ni has aprendido que se responde cuando te hablan?

- Es que yo no hablo con capullos como tú.

- Pues acabas de hacerlo

- Capullo.

- Preciosa, a ver si controlamos nuestros modales ¿no? - me di media vuelta y le ignoré - Dices que no hablas con capullos, pero si yo soy un capullo, ese chico, y ese, y ese, son capullos también - dijo mientras señalaba a los chicos con los que había estado toda la fiesta.

- ¿Ah si? ¿Y como has llegado tu a esa conclusión?

- Resulta que son de mi gente preciosa, son como yo, mis amigos - joder. Había estado todo este tiempo con sus amigos... No sabía que decir respecto a eso.

- Eso no significa que también sean capullos como tú.

- Lo que tu digas preciosa, ¿bailas conmigo? - dijo mientras comenzó una canción lenta. Miré a mi alrededor y los tres chicos que había conocido estaban bailando cada uno con Sophie, Amanda y Melanie. Mierda, no tenía ninguna opción...

- En tus sueños.

- Venga preciosa, relájate un poco y déjate llevar... - susurró mientras me agarraba de mi cintura.

- No me toques capullo - me separé rápidamente de él y me fui de la fiesta. Me quedé aliviada al ver que no me siguió. Me gustaba este campamento, pero sabía que iba a ser duro aguantar los tres meses de verano a aquel capullo, Nash Grier.

Summer (Nash Grier)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora