Solo ||Valt Aoi||

Lo Lamento

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–Ah... Iré a buscarlo... –dijo Free mientras iba en busca del peli-azul.

El albino se sentía mal por dentro, quizás era lo mejor, pero no podía evitarlo. Si había algo que había aprendido es que el ser humano es muy envidioso, uno siempre puede decir que será feliz si la persona que ama es feliz con alguien más, pero lo que realmente nos referimos es que queremos que esa persona sea feliz con nosotros.

–Em...–pronunció Audaz mientras se rascaba la nuca con algo de incomodidad–¿Cómo andas, Shu?–

El otro rubio tomo el abanico del contrario y comenzó a golpearlo, sabía muy bien que algún día lo llevaría a un precipicio y lo lanzaría, pero descarto la idea al instante, pues en primera: estaba su temor a las alturas y en segunda: porque, si lo llegaba a lanzar, se quedaría sin molestar a alguien.

El de orbes rojos negó con la cabeza, tenía que asimilar aquella escena que anteriormente había visto. No quería aceptarlo, pero se sentía devastado, caminó hacia una banca y se sentó.

–Entiendo como te sientes–habló Daigo mientras se le acercaba al albino–Pero... Tú lo quisiste así, lo alejaste... Siempre espero por ti, estuvo sufriendo, pero sinceramente ahora es tu turno de sufrir y verlo feliz con alguien más–

Lo que dijo el azabache lo dejo sin palabras, pero era la verdad. Valt estuvo esperando por días, semanas, meses y lo perdió por hacerlo esperar dos años.

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El peli-azul se tapó la cara con sus manos, estaba consiente de que Free estaba sentado a un lado suyo, por ende le daba algo de pena que lo viera sonrojado. Y para rematarla, el rubio acariciaba su cabello; cosa que lo avergonzaba un poco más.
Tomó las manos de Valt y lo miró, sonrió inconscientemente al ver a su amigo rojo como un tomate.

–¿Por qué saliste corriendo?–preguntó de manera seria–¿No estabas muy tranquilo cuando lo saludaste?–

–No, no es eso–susurró Valt mientras desviaba la mirada–Es sólo que... Es raro verlo de nuevo–

–¿Y eso no te agrada?–

–Claro que me agrada el que vuelva–no mentía, en verdad estaba feliz de que el albino haya vuelto, pero le resultaba algo extraño–Es mi amigo y todo, pero... Él tuvo su oportunidad–

El rubio ladeó su cabeza, no entendía a que se refería con "Él tuvo su oportunidad", miró al peli-azul para que le explicase, pero este negó con la cabeza dándole a entender que no le tomara importancia a lo último que dijo.
Bajó la mirada y suspiró, quizá lo mejor era comenzar a olvidar a Shu y buscar a alguien más.

–...Ah, puedes decirme lo que sea...–sonrió un poco.

–Es un secreto–sonrió cabizbajo–Lo insinúan, pero yo no he confirmado nada, promete que no dirás nada–

–Umm, no sé–respondió de manera juguetona–No me agrada el hecho de hacer promesas, mucho menos si vienen de una persona llamada Valt–

–Sólo promete que lo harás–sonrió levemente mientras daba un pequeño golpe al hombro del rubio.

–Esta bien– 

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–No me agrada la idea de decir esto...–nuevamente habló Rantaro–≫Lo siento≪, pero lo has perdido; amigo–

El de orbes rojos asintió con comprensión, se levantó de su asiento y salió del lugar despidiéndose de sus amigos.

──── ≫ •°.Solo.°• ≪ ────

Pensé que no lo tendría para hoy :''v, y pido disculpas si quedo feo el capítulo es que me desespere por cosas de la escuela pero eso no me va a detener :'3.

Bye :3