Parte 12 Chaeyoung simplemente te amo <3

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CHAEYOUNG MIND

Comencé a frotar mis manos nerviosamente, mientras mi mirada se paseaba por el techo de la casa de Mina.

-¿Y bien?- El padre de Mina me miraba algo curioso.

-Bueno señor Myoui, yo.... realmente amo a Mina mas que nadie y mi intención es hacerla feliz, hacer que no necesite nada, que se sienta la mujer mas hermosa del mundo, que sepa que lo es todo para mi y le prometo que lo hare hasta el día que muera-

El padre de Mina soltó un suspiro, froto sus manos sobre sus rodillas y se levantó. Vaya ¿estuve tan mal?, pensé.

De pronto sentí unas palmadas en mi hombro y me giré.

-Bienvenida a la familia Chaeyoung- el padre de Mina tenía una gran sonrisa.

De inmediato me levanté e hice una reverencia -Muchas gracias señor-

Levántate niña y ve a la cocina, quizá Mina y tu suegra necesiten ayuda.

No pude evitar sonreír al oír esas palabras, -Si, gracias de nuevo señor- hice otra reverencia y sali hacia la cocina.

Entre a la cocina y Mina y su madre servían varios platillos en distintos tazones y recipientes.

-Ohh Chaeyoung, Mina dice que te gusta el natto, su padre ha hecho natto especialmente para ti- dijo mientras servía el natto en un mejor recipiente.

-Ohh muchas gracias- hice una reverencia -No debieron molestarse- Su madre me devolvió una cálida sonrisa, la verdad es que Mina y su madre son muy parecidas, tome unos cuantos tazones y ayude a llevarlos a la mesa.

Terminamos de acomodar la comida y nos sentamos, Mina por su puesto estaba a mi lado.

La cena siguió sin nada especial en particular, su madre no dejaba de hacernos cumplidos siempre que tenia la oportunidad, su hermano de vez en cuando cruzaba la mirada conmigo y solo me dijo -Cuídala bien, sabes que Mina es la mejor chica que puede haber-, su padre nos veía y nos sonreía de vez en cuando.

MINA MIND

Todo estaba perfecto, no podría haber pedido mejor reacción de parte de mi familia, mi madre está feliz, mi padre está feliz, mi hermano esta feliz, yo estoy feliz y lo más importante Chaeng está feliz, solo desearía que pudiéramos hacer lo mismo con su familia, su padre ni hablar era peor que imposible, pero su hermano parecía un buen chico, supongo que ella dirá cuando será el momento indicado.

Terminamos de cenar y Chaeng y yo salimos al jardín, la noche es fresca, el viento revoloteaba nuestro cabello, la brisa de la playa cercana se deja sentir, noches como esta son especiales y me alegra al fin tener a alguien para compartirlas.

-Mina..-

-¿He?- dije volteándola a ver.

-Tu familia es genial- sonrió y me dio la mano.

-Gracias amor- le tome la mano de igual forma.

-De nada, es la verdad-

-Oye... Chaengie- la mire a los ojos.

-¿Qué paso Minari?-

-Tu hermano- suspire -Tu hermano... ahhh ¿apoya todo esto o no tiene ni idea?-

Dirigió su mirada hacia el cielo.

-Mina, el sabe de ti, obvio que le hablado de esto, ¿Por qué?- me miro.

-Pensé que como ya tuvimos una cena con mi familia, podríamos salir a algún lado con la tuya-

-Mmmm- arqueo una ceja -Mi familia he, bueno mi familia es de dos integrantes, mi hermano y yo- sonrió.

Michaeng *Una historia profunda*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora