JURASTE AMARME /NamJin\ [ T E R M I N A D A ] {T1}

QUERER DECIR TANTO, PERO SABER QUE ES MEJOR NO DECIR NADA

- B-bueno... Yo...

- ¿"Tú"?

- Tú y yo... So- ¡Cumplimos 5 años de aniversario de nov-amistad hace tres meses!

- ... ¿Eso es todo?

- Si... -respondió desanimado.

- Bueno -se dirigió a la puerta- no me esperes despierto. Llegaré tarde -salió de la mansión sin pensar en cómo se sintió Jin tras su reacción.

«¿Qué fue lo que me paso? ¿Soy un idiota o qué? ¿Por qué no le dije la verdad?» Se preguntaba a sí mismo, Seok Jin, al no haber tenido el valor de decirle a Nam Joon la verdad.

Pese a su "amistad" con Nam había mejorado, el estado de Jin no tanto pues quería que el moreno lo recordase lo más antes posible ya que "la arpía" de Jennie estaba ganando "terreno" y eso lo ponía furioso.

«¿Qué puedo hacer para que Nam Joon se enamore de mi otra vez?... espera... ¿Cómo se enamoró de mí en primer lugar?» Se planteó el pelinegro, pues no tenía respuesta a sus dos preguntas ya que siempre había confiado en las palabras del moreno.

«¿Y si se enamoró de mi por mi comida? Bien dicen que "el amor entra por el estómago"» Se dijo a solas pues fue lo primero que se le vino a la mente.

- ¡Claro! Eso debe ser... ¿Qué le puedo preparar para cuando regrese? ...mmm... ¡Ya se! Preparare una torta helada. De seguro le encantará -dicho esto. Se puso manos a la obra y empezó a preparar dicha torta con mucha dedicación y esmero.

Para cuando termino, guardó la torta en el refrigerador y miro el reloj pegado a una de las paredes de la cocina.

- 9:41pm. Ya es muy tarde ¿Dónde...? Es verdad, está cogiendo con la "víbora" -bufó con molestia y se fue a dormir.

[...]

La luna está en la cima. El viento golpeaba a los arboles con frenesí haciendo que estos se sacudieran al compás del canto silencioso de la luna. Hacía frio y estaba nublado, iba a llover. Las primeras gotas de lluvia anunciaban la llegada de una tormenta. Mientras un moreno de pelo castaño entraba en una mansión tratando de no hacer ruido paro no despertar al único habitante durmiente de aquella "casa".

Subió las escaleras con cautela y caminó a paso ligero por un largo pasillo hasta detenerse en la que creía su habitación. Giró la perilla y entro a la habitación un tanto peculiar pues, esta contenía objetos de color rosa, en su mayoría; raros para un chico diría yo.

Aquella habitación, era totalmente blanca; el techo, las paredes, e incluso el suelo, pero el suelo era de material "Pack". También había una cama de dos plazas con sabanas en tonos pastel. Una alfombra de color fiusha. Un ropero con detalles en rosa y negro. Un escritorio color mármol. Una cómoda granate. Unas mesitas de noche blancas a los costados de la cama con lámparas rosa pastel y blancos. Y, una puerta pálida que guiaba hacia "un baño de ensueño". En fin.

El castaño de ojos canela se acercó a la cama de un pelinegro que dormía en ella y se acostó a su costado. El piel pálida, que dormitaba, se despertó por el frio en su espalda y volteo a ver al moreno.

- Llegaste muy tarde, Nam. -dijo Jin adormilado.

- Lo siento. No quise despertarte -dijo Nam Joon apenado.

- No importa. Igual no podía dormir

- Fue por mí, ¿verdad?

- En parte... Y... ¿Cómo te fue?