JURASTE AMARME /NamJin\ [ T E R M I N A D A ] {T1}

EL MEJOR REMEDIO PARA LA TRISTEZA ES UNA SONRISA

- ¿"Has decidido"?...

- Que...

- ¿"Que"?

- Tal vez deberíamos darnos un tiempo para conocernos mejor y así...

- ¿Está bien?

- Si...

- ... ¿Quieres algo de tomar?

- No. Ya me voy.

- Bueno. Pero...

- ¿Qué pasa?

- Tienes que ir al médico a hacerte una revisión medica

- ¿A si? ¿Cuándo?

- Uno de estos días, supongo.

- ¿Te parece ahora?

- Sí. Claro.

- ... -el moreno se dispuso a salir cuando notó que Jin no lo acompañaba-. Emm... ¿podrías acompañarme? Es que no sé dónde queda el hospital.

- ... -se sorprendió un poco- Claro. -sonrió y ambos se dirigieron al hospital-.

Todo el trayecto fue apacible, pese al silencio que había; compartir un tiempo a solas era todo lo que necesitaban para sentirse felices y cómodos. ¿Qué más podían pedir? Estaban al lado de la persona que querían y no había nadie que los interrumpiera pues fueron caminando y extrañamente la ciudad estaba más tranquila que otros días.

Pero, como todo tiene un inicio, también tiene un final. Llegaron al hospital y fueron atendidos por una amable recepcionista, joven, que al momento de ver a Seok Jin, se portó de una manera algo coqueta. Por supuesto, Jin ya estaba acostumbrado y se le hacía normal que alguien -tanto mujeres como hombres- le coqueteara de una manera "sutil".

Sin embargo, a Nam Joon no se le hacía nada gracioso y aunque no mostró ningún interés en el comportamiento de la recepcionista, o eso era lo que aparentaba, si estaba molesto con Jin pues este dejaba que lo "cortejaran" -según Nam Joon-. De alguna manera, Nam Joon logro que la recepcionista se fuera "en busca del doctor" y dejara a Jin en paz por un momento.

- Que amable chica ¿no? -dijo Jin con inocencia-.

- Demasiado, diría yo. Era MÁS QUE OBVIO que te estaba coqueteando -dijo levantando la voz en: "más que obvio", mientras miraba fulminantemente a Jin, quien no se dio cuenta-.

- Pff. -dijo vanidoso-. Ya estoy acostumbrado. Suele pasar y pasa mucho

- No sé pero algo se trae. Y no me gusta. -dijo el moreno evidenciando sus celos-.

- ¿Y eso a ti en que te afecta? -pregunto Jin con una sonrisa juguetona-. ¿Acaso estas celoso? -agregó-.

- ¿Y-yo? -dijo algo nervioso-. Ay, por favor. ¿Cómo crees? -se hizo el ofendido-.

- ¿Entonces?

- Solo digo que esa chica me trae mala espina y no creo que te convenga

- Sí, sí. Lo que tú digas.

- En serio. Quiero lo mejor para ti.

- (Lo mejor para mi seria que me recordaras y amaras como antes) -pensó Jin desanimado-. Supongo

- ¿Pasa algo?

- No. Nada. No te preocupes -lo miró y simuló una sonrisa-.

La recepcionista apareció justo en ese momento y llevó a ambos chicos a la oficina del doctor Jackson quien revisó a Nam Joon y pudo confirmar que se encontraba en perfectas condiciones físicas.