Capítulo 4 Hermanos postizos

87 2 0
                                    

Sobre las cinco de la tarde Jesús y Dani se habían ido a prepararse y bueno, antes a preguntar a sus padres si les dejaban salir por la noche con nosotras, las niñas que conocieron en el parque acuático (así les hablaban de mí y mi mejor amiga).

Media hira después de que se fueran me vibra el móvil y era Jesús diciéndome que les dejaban salir. Acordamos en quedar en frente de la casa de Ana a las 22:30.

-Ey, pues no vamos a perder el tiempo que tenemos sólo cinco horas para ponernos guapas para la fiesta.- dice Ana bromeando.

-Pues manos a la obra, ¿no?

Le dije a Ana que iba a ir a mi casa un momento para coger la ropa y demás y que volvía en un momento. Ella insistió en acompañarme para ayudarme a elegir lo que me iba a poner.

Tras estar discutiendo durante unos diez minutos sacando ropa del armario, escogí un vestido corto de palabra de honor con preciosos estampados rosados, azules y morados, con la parte de la "falda" de talle alto, y unas sandalias rosas básicas a juego. También cogí un bolsito pequeño para guardar la cartera y el móvil.

Cuando volvimos a mi "segunda casa" lo primero que hicimos fue poner el último disco de One Direction (que le había prestado a Ana hace un par de días) a todo volumen. Estuvimos casi una hora bailando, saltando por la cama y cantando como gallos. Con Best Song Ever traspasamos los límites de locura. Aunque Midnight Memories no se queda atrás.

Sobre las siete más o menos, conseguí arrastrarme hasta el baño y me fui a duchar. Seguida de mí, se duchó Ana y luego nos hicimos la manicura y la pedicura, así, un poco por encima. El disco seguía sonando, pero aquello ya no parecía un concierto en directo.

Estuvimos hasta las nueve y media escuchando música, cotilleando en las redes sociales sobre los famosos, sacándonos fotos... El tiempo se nos pasó volando y comenzamos a peinarnos y a vestirnos. Yo me puse lo que me traje de casa y Ana me prestó un collar que combinaba a la perfección con mi ropa. Ana se vistió con un vestido negro ajustado, de mangas cortas y con la espalda al descubierto, con unas simples sandalias doradas que le daban un toque elegante.

-Tía y qué nos hacemos en el pelo?-digo mirándome al espejo.

-Pues yo pensé en ir con el pelo suelto y con una trenza de cascada de un lado, que me vas a hacer tú.

-Hmm, y si no quiero? Que noo, que yo te la hago monísima. Pero, y yo cómo voy?

-Quieres que te haga una espiga?

-Uy hermanita, cómo me conoces. -le dije dándole un achuchón.

Se nos hicieron las diez y veinte y todavía nos faltaba maquillarnos y retocarnos un poquito. En cuanto al maquillaje, las dos nos pintábamos igual. Nos gustaba ser discretas pero siempre resaltábamos nuestros ojos azules, ya que éramos rubitas.

A lo que iba, ¿quién llegó tarde? ¿Nosotras? Jamás. Nótese la ironía. Sí, salimos a la calle con diez minutos de retraso.

Ahí estaban ellos, tan guapos y tan iguales como siempre, en frente de la casa de Ana, desde las 22:30 justo. Llevaban los dos una camisa blanca y unas bermudas, Jesús rojas y Dani azules, con unas Vans negras.

-Madre del amor hermoso! -dice por lo bajito Jesús, pero lo suficientemente alto como para que lo oyéramos.

-Qué pasó Jesusito, tenemos monos en la cara? -dije picándole un poco.

-Mila hija mía, os habéis mirado al espejo?- contesta Dani en nombre de los dos.

-Uf si yo te contara...

-Que corréis peligro, menos mal que estamos nosotros para protegeros- dice por fin Jesús. Son más bonitos.

-Uy y vosotros qué, bobos? Menos mal que pensarán que nosotras somos vuestras novias que sino os ligáis a media España. -responde Ana un poquito sonrojada.

-Bueno, la idea no está naaaada mal-dice Dani guiñando un ojo- Nos vamos ya no?- y nos ofrecen la mano los dos (Jesús a mí y Dani a Ana).

Decidimos llevarlos al Faro, una discoteca al aire libre con vistas impresionantes, en la que se hacen fiestas de adolescentes cada dos fines de semana.

*******************

Llevábamos una hora y media allí, y el Faro cada vez se llenaba más. Nos lo estábamos pasando en grande. Bailamos y cantamos a más no poder. Lo dimos todo.

En un momento de la noche Jesús y Dani fueron a la barra a coger refrescos para los cuatro. Nosotras nos quedamos en el rincón en el que estuvimos todo el tiempo.

-Anda, mira que oportunos ellos-dije señalando a dos chicos.

-Aleex, Jacobiitoo-grita Ana saludándolos cuando los ve.

Eran nuestros mejores amigos desde pequeños. Casi siempre estábamos juntos. Por cierto, también eran muy guapos los dos, pero nunca tuvimos nada entre nosotros. Bueno sí, una relación de hermanos que espero que dure para toda la vida.

-Peeeero bueno! Para quién os habéis puesto tan guapas vosotras?- pregunta Alex mientras nos saludamos todos con un abrazo y dos besos.

-Aay si yo te contara...-dijo Ana volviendo la mirada al suelo.

-Bueno, nos podéis presentar a nuestros cuñis postizos no?-añade Jacobo.

-Cuñis no que no somos novios ni nada. Pero venga va, venid a la barra que están allí.- les contesté y me siguieron hasta donde estaban los gemes.

-Eey, os queremos presentar a alguien-les dije poniéndome en medio de ellos y abrazándolos.

Se giraron y añade Ana:- Gemelines estos son Alex y Jacobo, nuestros mejores amigos desde la infancia.

-Anda que os lo habéis currado eh rubitas mías-dice Alex riéndose mientras intentaba diferenciar a Jesús y a Dani.

-Nosotros somos Jesús y Dani, posibles futuros novios de vuestras rubitas-contesta Jesús en modo de broma, intentando ganarse nuestra confianza aún más. Luego los chicos se abrazaron. El abrazo fue tal, que parecía que se conocieran de hace mucho tiempo ya.

Para mi sorpresa, se llevaron muy bien los chicos entre ellos. Aunque si me pongo a pensar son los cuatro muy risueños y están todo el rato gastando bromas intentando hacer reír a los de su alrededor, y eso me gustaba.

Los seis nos lo pasamos genial, pero he de admitir que las chicas estuvimos todo el rato mirando medio embobadas a los gemelos. Espero que no se notara mucho.

+++++++++++++++++++

MUCHÍSIMAS GRACIAS POR LEER MI NOVELA, ESPERO QUE OS ESTÉ GUSTANDO Y QUE SEAMOS CADA VEZ MÁS.

PD: INTENTO SUBIR LO MÁS RÁPIDO POSIBLE, PERO EL TIEMPO NO ME DA PARA MÁS

UNA VEZ MÁS, GRACIAS.

Las apariencias engañanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora