| ᴀᴜ ᴍᴏᴅᴇʀɴᴏ | ᴍɪsᴛᴇʀɪᴏ |
❝Armin despierta muy confundido en un hospital; no recuerda nada acerca del motivo por el cual se encuentra allí y sus recuerdos están revueltos completamente.
¿Existe algo peor que despertarte sin tener recuerdos, enterart...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
❝¿Qué somos, qué es cada uno de nosotros sino una combinatoria de experiencias, de informaciones, de lecturas y de imaginaciones? Cada vida es una enciclopedia, una biblioteca, un muestrario de estilos donde todo se puede mezclar continuamente y reordenar de todas las formas posibles.❞
˗ˏˋ Petra Ral ˎˊ˗
──────────────────── ❈ ───
[Narrador: Armin Arlert]
Desvié la mirada tratando de darle a entender al doctor y a la señorita Petra que no volvería a las terapias de kinesiología, no los estaba viendo pero seguro que intercambiaron una mirada entre ambos antes de tomarse su tiempo y salir de la habitación, probablemente sus pasos eran lentos porque me estaban dando tiempo para cambiar de opinión.
Al final no ocurrió lo que querían y yo me quedé en mi cama abrazando mis piernas mientras miraba el cielo a través de la ventana.
Era un día lluvioso, las gotas de lluvia chocaban con el cristal y provocaban un efecto relajante que me hacía olvidar el mal trago que tuve que pasar con mis encargados al volver a discutir el asunto de las terapias.
Me arrastré en mi cama hasta una de las sillas que tenía cerca y sostuve entre mis brazos el peluche de Stitch, como si fuera una costumbre desde la primera vez que lo tengo conmigo, restregué mi cara contra la felpa del muñeco y mordí una de las orejas. De vez en cuando le echaba una mirada al exterior y luego miraba la tarea que ya había completado.
No era demasiado complicado, tal vez tenga algunas dificultades para los, aparentemente, nuevos temas de matemática llamados parábolas, pero debido al tiempo libre que tengo dentro del hospital es normal que termine todo lo que tengo pendiente y me sobre tiempo para mirar la nada mientras pienso... bueno, en nada, técnicamente. La mayoría de las ocasiones simplemente estoy analizando mi alrededor con aburrimiento y a veces también intento recordar algunas cosas.
Sé que la señorita Petra dijo que no era necesario que forzara la situación, ¿Pero qué más podía hacer?
La culpa que me invade luego de despedirme de mis padres y quienes, al parecer, son mis mejores amigos desde niños, es algo que no puedo soportar y me deja un amargo sabor en la boca que luego se convierte en un nudo en mi estómago.
Sin embargo, tal como ella me advirtió, los recuerdos no pueden volver solo porque lo desee mucho o si hago un gran esfuerzo con la mente.
Este es un tratamiento que llevara tiempo, será difícil a medida que pasen los días y es posible que siquiera reconozca algunas cosas básicas con las que solía vivir en el pasado. Ya siquiera tengo los mismos gustos en literatura, las historias que supuestamente yo le enseñé a Mikasa me resultaban estúpidas.
