Ya se había vuelto costumbre esperar a que todos se durmieron para salir de la habitacion y bajar a la Sala común para encontrarse y pasar toda la noche charlando hasta que salga el sol.
Habían acordado no decirle nada a nadie sobre sus reuniones nocturnas, pero lo más difícil era disimularlo durante el día, nunca habías tenido un noviazgo a escondidas, era más difícil de lo que creías qué iba a ser, no poder besarlo o abrazarlo cada vez que se encontraban o no poderle quitar la mirada de encima, realmente te resulta muy difícil.
Ginny y Hermione no estaban completamente al tanto de todo lo que sucedía, sabían que algo pasaba, ya que claro, ellas estuvieron en la primera noche. Pero lo que no sabían era que te escapabas a mitades de la noche y que no volvías hasta los primeros rayos del sol.
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Estabas en el comedor desayunando con tus amigas, hablando sobre las materias que tenían en ese día, cuando llegaron Harry y Ron y luego ellos los gemelos. Cruzaste mirada con George y lograste disimular la sonrisa.
-Hola - saludaron todos.
Se pudieron a charlar, hasta que notaron el ingreso de cientos de lechuzas al gran comedor. Hermione recibió su periódico diario, pero te sorprendiste al notar que una lechuza se dirige hacia ti, qué extraño - pensaste - nunca recibías nada. La lechuza aterrizó frente a ti y en una de sus patas había un sobre con tu nombre escrito. Lo desataste y abriste el sobre, en él había una carta que empezaste a leer en voz baja.
"Querida T/N:
Nunca había sentido algo tan fuerte como lo que siento por tí, no puedo dejar de mirarte cada vez que te tengo enfrente. Eres la luz que me ayuda a despertar y las estrellas que me hacen soñar. Eres lo que siempre he buscado y por fin he encontrado, pero hay algo ahí qué me estás preocupando ¿sere para tí eso que estás esperando?
Atte: Tu Admirador secreto"
No lo podías creer, nunca antes te habían dedicado un poema y menos uno tan hermoso, claro que ya sabías quién era este admirador tuyo, más obvio no podía ser. Levantaste la vista para poder verlo y agradecerle, pero fue cuando te diste cuenta que todos te estaba mirando, no te habías dado cuenta de lo sonrojada que estabas. Guardaste la carta disimuladamente dentro del sobre y este dentro del bolsillo.
-Quien te envió la carta? - Te preguntó Hermione, que al igual que todos, estaba intrigada por saberlo.
-Oh no es nada, es mi madre, dice que por fin entendió como enviar una lechuza y que a partir de ahora me enviará mas cartas - Mentiste, y se ve que te creyeron, porque siguieron hablando de otro tema.
Término el día para todos, menos para tí. Espérate en la cama hasta que tus compañeras se duerman y te levantaste para cambiarte y luego bajar para encontrarte con tu chico. Al llegar a la sala, él ya se encontraba allí, así que le saltaste ensima para abrazarlo y besarlo apasionadamente.
-Jaja que linda -Dijo entre risas el pelirrojo una vez separados - Cual es el motivo de este acto de pasión?
-Jajaja solo es mi forma de agradecerte lo de hoy.
-Hoy? Agradecer el que?
-La carta
-Que carta? La de tu madre? Piensas que fui hasta la casa de tu madre a enseñarle a enviar lechuzas? Seré un buen novio, pero no para tanto.
-Es enserio? Vos no enviaste la carta?
-No, para, estamos hablando de la misma carta, no? La que te envió tu madre esta mañana o es que te llegó otra carta?
-Eeh no olvídalo, estoy medio dormida es todo.
Retomaron la conversación que habían cortado la noche anterior y se olvidaron de asunto de la carta. Pero no parabas de pensar, si George no te la había enviado, quién había sido?
