Días Después:
Estábamos llegando a nuestras casas y de la mía sale mi tía totalmente histérica gritándole a mi tío.
-¡Nada de esto hubiera pasado si no fuera por tu culpa!- grita Marcus.
-¿¡Mi culpa!? ¡Tu eres la del problema, fuiste tu quién por creer que el quería algo serio contigo, se lo dijiste y él le dijo a su jefe!
-Creo que es una pelea bastante fuerte de pareja- susurró Jaco.
-Si, mejor vete, voy a ver que hago.
-Escríbeme luego, adios.
-Adios.
Luego de dos interminables horas, las cosas se calmaron, pero aún así, Marcus tuvo que dormir en el sofá de la sala de arriba.
-¿No creerás que dormirás aquí? ¿o si?- dijo mi tía.
-¿Pues dónde más?- le preguntó Marcus ya harto de ella.
-Abajo.
Marcus con total furia se levanto tomando su almohada y se fue a la planta baja de la casa.
-Ludi, ven, quiero hablar contigo- dijo mi tia y yo estaba tragándome el miedo.
-¿Sobre qué?
-Tu solo ve a tu habitación, ahí hablaremos.
Me dirigí a mi cuarto y esperé con terror a mi tía. Sinceramente cuando se enojaba era demasiado aterradora.
Tenía curiosidad de lo que quería hablarme, y sobre la pelea entre ellos.
Nunca los vi enojados y muchísimo menos gritando.
-Ludmila.- dijo mi tía entrando a mi cuarto.
-¿Si?
-Quiero pedirte un favor. No me odies por lo que hice. Somos humanos y cometemos errores.
-¿Qué?- lastimosamente yo no entendía nada.
-Tu tío mañana se mudará y se irá de aquí- me dejo boquiabierta. Marcus era como mi padre. No podía dejar que se fuera.
-No puedes hecharlo.
-Fue una decisión suya.
-Pero, ¿Por qué?.
-Porque me acosté con el secretario del jefe de la empresa rival. Una empresa con la cual siempre habíamos competido. Y no solo eso, sino que también le dije todo lo que hacíamos en la empresa, y ahora estamos en ruinas.-okay, estaba impresionada de la incredulidad de mi tía.-lo lamento.
-No es a mi a quién debes pedirle perdón, sabés bien a quién.
-Soy tan ingenua.
Mi tía solo me miraba con los ojos llorosos y colorados. Estaba destrozada por su error, un error el cual la alejaría de varias personas, incluyendo a la persona que conoce desde los 11 años, su marido, mi tío, Marcus. Me sentí pésimo por ella, pero nadie puede borrar los errores de nadie, ni siquiera los nuestros. El pasado no se puede cambiar, pero con el presente escribimos nuestro futuro. Y pensar que por un simple deseo de lujuria y aventura ella se creyó las palabras típicas de un interesado.
(...)
Ludi: ¿Por qué lo dices?
Jaco: sé lo que es el amor, Darías todo por la persona que amas. Se perdonarán.
Ludi: crees que mi tia se haya enamorado de ese hombre?
Ludi: crees que sea amor entre ellos? O sabes como yo puedo saberlo?