5-. Rumores.

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¿Por qué lo hice?, yo también me lo pregunto.

Ella aún tomaba mi mejilla, volvio a preguntar, y otra vez, hasta que hable.

-Creo que es porque me  aburrí, me aburrí de ser el vicho al que todos pisotean, me cansé de que me molesten, que me pasen a llevar, no me molesta ser un don nadie al que con suerte lo conoce su mejor amigo, eso no me molesta, me molesta que me pisoteen, que me pasen a llevar y no poder hacer nada, no defenderme, por miedo a él, que por muy mastodonte que sea, no tiene derecho a pasar sobre la gente, me canse y si no me desahogaba allí, y lo hacia en otro momento, seria peor. Además de que abuse de su fuerza, que por ser el más "popular" debemos lamerle los pies. Ya no más, no sere su juguete, no dejare que me pasen a llevar.

-Lo siento...- Susurro.

-También lo hice por ti- Susurre. No sé que me pasa, yo jamás he sido de las personas cursis y románticas, no alago a la gente, por muy guapa que sea, no soy así. Pero con ella si, puede que sea porque  me gusta, porque me "atrae" desde cuarto basico, no lo sé.

-¿Por mi?- yo asentí- ¿por qué?

-Quiere que me aleje de ti, y yo no quiero. Ademas, con suerte hablamos, y me caes muy bien como para dejar de hablarte.- No, no le dire que me gusta, seria muy rapido, algo extraño,muy psicópata, que me guste alguien,  con la que hablé durante tres días, seria algo absurdo.

Se creo un silencio, no incomodo, sino que es un silencio reconfortante. Seguiamos igual que antes, ella con su mano en mi mejilla, solo que ahora, estaba más cerca.

-¿Era yo?-Rompió el silencio.

-¿Qué?

-El dibujo- Explicó- ¿Era yo?- Sentí como mis mejillas se calentaban.

-Si.

-¿Me lo das?- Me aleje de ella para poder mojar mi cara. Cuando terminé y seque mi cara en el chaleco, la miré y ella estaba haciendo pucheros y tenia sus manos juntas, en modo de súplica.- ¿Me lo das? por fis, por fis, por fis.

-Esta bien- Ella rió.

-Dibujas lindo- Yo sonreí y ella igual, nos callamos, pero de la nada ella solto una enorme carcajada.

-¿Estas bien?- Ella trataba de no reir, tomo agua y se relajo un poco.

-Es que se me vino a  la mente la pelicula Titanic.

-¿Y?

-Y se me vino eso de pintame como una de tus mujeres francesas, Jack.- Comenzamos a reir, de verdad se pasa bien con ella.

Luego de un rato nos fuimos a clases, matematica, con el profesor Eduardo. Yupi.

Llegamos a clases cinco minutos tarde, ya que Valeria queria entrar al baño. El profesor nos dio un pequeño regaño, aunque cuando me vio se sorprendió,  ya que nunca llego tarde.

Me senté en mi lugar, Gera me miraba un tanto sorprendido y confundido. Le conte lo ocurrido, lo que paso con Matías (si le decia lo de Valeria de seguro se burlaria de mi hasta que salgamos de la universidad), él estaba sorprendido pero orgulloso.

La clase paso rapido, nos dieron las fechas de pruebas y de trabajos, pero el más cercano es un dos semanas.

Salimos de clases y bagamos por el colegio, como lo hacíamos todos los recreos. Él comía chocolates, y yo galletas. Estuvimos conversando sobre lo ocurrido esta mañana, el me decia que se sentia orgulloso de mi, por defenderme y todo eso. Sin querer se me soltó eso de Valeria, el solo rió y me molesto un poco, ya que lo interrumpió el timbre, que nos indicaba entrar.

-¿Sabes que Matías te mira con una cara de odio enorme, que hasta dan ganas de fotografiar?- Él apuntó en direccion a la escalera, ahí estaba Matías, con sus amigos.

-No me importa.

-Por Dios, que rudo eres-Dijo mi amigo sarcasticamente. Le iba a responder, pero un silbido no me dejo, una voz de hombre decia Hey, pero no me gire, no creo que me llamen a mí.

La misma voz llamo unas seis veces, gritaba: Hey tú, oye, tú,  hey chico. Pero lo ignoraba, hasta que grito mi nombre.

Me di vuelta, esperando encontrarme con Matías, pero no era él, sino que era Cristóbal, un chico un año mayor que yo, se dirigia para acá.  No creo que Matías lo mando para darme una paliza.

Cristóba me saludo con la mano y luego a Gera.

Él tenia 18 años, recien cumplidos, por lo que me mencionó Valeria, es dos cabezas mas grande que yo, musculoso, cabello negro al igual que sus ojos. Creo que es hermano de Amanda, la amiga de Valeria. No es un brabucon, es un popular simpatico, por las que muchas se babean, y muchos desearían ser como él. Es simpático, solo he hablado dos veces con él y fue solo porque queria salir con mi hermana.

-Me entere sobre lo de Matías, hermano, te felicito-Cristóba me abrazó y golpeo mi espalda.

-Bueno, gracias.

-Si, tambien venia a preguntar algo.

-Claro, pregunta.- Él paso sus manos por su cabello y luego aclaro la garganta.

-¿Es verdad que sales con Valeria?- ¿Qué?

-¿Valeria Araya?- Él asintió- no, yo no salgo con ella, ¿por qué preguntas?- En realidad su pregunta me tomaba por sorpresa, no entendía el por qué de su pregunta. Yo no salgo con Valeria, es solo una amiga, menos que eso,  una conocida.

-Rumores, dicen que golpeaste a Matías porque queria quitarte a Vale, y que él te golpeo primero porque te vio besandote con ella, y que tú le devolviste el golpe por  insultar a tu chica, entonces hay se armó la pelea.  Tambien dicen que son novios o algo asi, y creo que escuche a unas chicas decir que hasta te acostaste con ella  y un monton de cosas más.

Creo que mi mandíbula estaba en el piso, no puedo creer que hayan dicho todo eso, que salimos y que la bese y menos me acoste con ella.

Es imposible.

No solo porque ella no se interesa en mi, o porque solo sean rumores. No puede ser posible por el simple hecho que yo soy virgen de labios, así podria decirse. Y es más que obvio que soy virgen, en todos los sentidos.

Penoso, lo sé.

-Ya veo que ed mentira todo eso- dijo Cristóbal sacandome de mi trance- los chicos me llaman, nos vemos- empezo a caminar donde estaban un grupo de cuarto, cuando iba a mitad de camino se volteo y grito- Ah, se me olvida, felicidades por la paliza a Matías- aplaudió y siguió su camino.

-¿De verdad todos dicen eso?- pregunté a mi amigo.

-Lamentablemente si. Pero ve el lado bueno, quedaste como todo un héroe- trató de animarme.

-Pero no lo soy, solo me defendí. Ni si quiera eso, fue un impulso, o no sé, no sé que pasó- Gera golpeo mi espalda en forma de apoyo, y nos dirigimos a clases, ya que estamos llegando diez minutos tarde. Y la profesora Amelia no es muy simpática.

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