Compañero.

Chico Directo.

Nunca había pensado en que llegaría a caer tan bajo algún día. Día donde estaría totalmente rodeado de lobos con demasiado olor a perro sucio y sobre todo que ellos no me atacaran porque (esta es la parte más rara) mi pareja, que también era un lobo estaba a mi lado mientras comprábamos carne he ingredientes para volver a llenar la nevera que ya se había vaciado por la grande cantidades que tenía que cocinar para el lobo. 

Mi vida... Es como una mala comedia irónica.

-¿Crees que necesitaríamos más carne?-agrego JongIn mirando a KyungSoo.

-Querido, comes carne todas las veces del día y un kilo cada una de ella compramos 30... Pronto debemos volver a venir.- Kai asintió y paso su tarjeta a la cajera.
-Listo JongIn, tengan un buen día- agrego la chica saludando mientras Jongin tomaba todas las bolsas.

-¡Hey! Déjame ayudarte.

-Puedo solo, tenemos que ir a casa y luego con mi hermana.

-¡Cierto! Se me olvidaron las galletas tengo que entrar de nuevo- estiro la mano para darme la tarjeta.- un par de galletas... Eso si lo puedo pagar lobito.-Corrí de nuevo al súper entrando directamente al pasillo de golosinas tomando las galletas sonriendo.

-Tú...-No pude evitar girar la cabeza y encontrarme con la mirada iracunda de una mujer que reconocí de inmediato.

- Ah, la desesperada.

-Mi nombre es Krystal, no desesperada.

-¿Te pregunte?- camine a la caja con ella siguiéndome. Entregando mi tarjeta y las galletas.

-No sé que rayos le hiciste a JongIn, pero él...-La cajera entrego su tarjeta y le agradecí rápidamente.

-No le hice nada y lo tengo. Apuesto que hiciste todo y no lo tuviste. Triste historia. Adiós.-Pero antes de poner un pie afuera la loba tomo mi mano.

-Te despedazaré.

-De acuerdo. Mientras tanto come una menta tu aliento huele a carne y cebolla. - Y quitando su agarre caminé al auto de JongIn.

-Listo-JongIn me vio y yo vi por la ventana como Krystal nos veía.

-Conduce.-le sonreí a Krystal despidiéndome sutilmente.

-Mis sobrinos te adoran. Aún no lo entiendo. -Agregó Jongin suspirando y sentándose en la sala esperando la comida que preparaba KyungSoo.

-Tengo un don con los lobos al parecer tengo tanta mala suerte que mi compañero es uno- Gruño Jongin al ver a KyungSoo entrar por la puerta con un gran plato de carne, vegetales y tocino.-Y que come como veinte lobos que horror.- llevo también un vaso con jugo de manzana dejándolo todo para él. Jongin no pudo evitar sonreír con aquel delicioso olor.

Jongin comenzó a devorar todo a su paso, pero KyungSoo solo pensaba en aquella pregunta que llevaba haciéndose desde hace un tiempo. -Jongin ¿Tienes un piercing en el pene?- Sobre decir que Jongin soltó parte de la comida comenzando a toser y tomar un poco de jugo.

-Puedes ser más sutil.-Agrego Jongin regulando su respiración después del ataque de tos.

-¿Cómo?

-No se "Oye Jongin ¿Quieres un café? Okay KyungSoo, Oye JongIn..."

-¿Tienes un piercing en el pene?

-Apuesto que fue mi hermana.-JongIn suspiro retomando la comida- Pero me mata la curiosidad ¿Cómo surgió el tema de mi pene?

-Bueno no fue directamente de eso que hablábamos, fueron de los piercings en mis caras, ella dijo que tenías uno donde no era visible. Y solo tocaba adivinar. Te he visto sin camisa y no tienes en los pezones, entonces solo me lleva a un lado- KyungSoo lo apunto con el dedo- Polla.

-¿Puedes no decirlo así?

-Pene, genitales, miembro viril, como sea.-KyungSoo- era cierto lo del Jongin rebelde...

-Termine de comer...

-¿Puedo verlo?- JongIn se levantó caminando al baño

-No te mostraré mi pene- entro al baño encerrándose mientras KyungSoo tocaba la puerta.

-Algún día saldrás de allí y me mostrarás tu polla, quizás no hoy quizás no mañana, pero pasará- Jongin escucho a KyungSoo irse.

-¿Está loco?- JongIn se metió a bañar.