CATARSIS |JJK|

Cuatro

12 de diciembre

Hacía más frío de lo normal y esto había ocasionado que Jungkook se despertara, sus brazos se sentía entumecidos y los froto un poco, no había notado que una enfermera estaba.

-El aire acondicionado está encendido, sin embargo sigue haciendo mucho frío- le dijo con anticipación pues noto como el castaño parecía temblar -tu desayuno está a tu derecha- se vio impaciente, ella sabía que él se había estado negando a comer desde que había despertado y solo había sobrevivido por las vitaminas que eran puestas por el suero que estaba en su brazo

-No tengo hambre- respondió con fastidio

-Sabes si no comes, no mejoraras- explicó ella para ver si finalmente así el desidia comer aunque fallo pues Jungkook solo giró los ojos

-No tengo hambre- gritó molesto por la insistencia

La enfermera salió del cuarto indignada pues no era la primera vez que él le gritaba y tampoco era a la única a la que Jungkook había respondido así.

Jungkook miró hacia la ventana, el día estaba bastante triste, pues la lluvia era cada vez más fuerte, algo que le hizo recordar cuando era niño y llovía de tal manera que parecía que el cielo se fuera a venir abajo su madre le preparaba chocolate caliente con galletas de chispas.

Un sonido lo sacó de sus pensamiento era alguien tocando su puerta aquello lo obligó a regresar a ver y la puerta se abrió tras cesar los golpes.

-¡Que bien, estás despierto!- ella entró con esa sonrisa tan característica y se acercó a la cama de Jungkook   -Adivina lo que traje- y sabía que Jungkook ni siquiera haría el intento entonces continuo- se que no es lo mejor del mundo, pero realmente pienso que el chocolate de máquina no es tan malo, de echo creo que es bueno, ah y también traje galletas, estas las preparan aquí en el hospital, en la cafetería, y más que para los pacientes son para los visitantes así que no saben mal- se sentó en la parte baja de la cama de Jungkook

-La cama debería estar más inclinada, la arreglaré para ti- tomo el control de la cama y apretó un botón
Él estaba sorprendido, pues creyó que ella no regresaría después de lo de ayer y además era como si hubiera adivinado lo que pensaba

-Dicen que el chocolate hace que nuestro humor mejore, así que supongo que te ayudará- aquello al decirlo dejo salir una pequeña risita

Puso unos de los vasos de cartón en la mano de Jungkook

-Ten cuidado está algo caliente- dijo bebiendo un poco del contenido de su vaso

Jungkook iba a decirle que se fuera pues quería estar solo pero al apercibir el olor a galletas recién hechas se detuvo, las miró receloso y sin darse cuanta relamió sus labios, se veían tan buenas, pensó.

-Vamos no tienen veneno, come- dijo señalando con su mentón -Yo odio comer sola, pues solo ver esos colores sombríos de las paredes me quitan aún más el apetito- explicó con un tono más funesto mientras tomaba otro poco de su chocolate -Pero bueno, solo me llevare esta y me iré- tomo una galleta puso sobre su vaso, el que antes había puesto en una mesita, se limpió las manos con una servilleta, cogio nuevamente el vaso, se levantó y abre de irse se detuvo a mirar a Jungkook y con la mano que le quedaba libre toco aquel perfecto rotro, él se sobresaltó, sin embargo la sorpresa lo hizo paralizarse y no dijo nada
-Nos vemos luego- dijo saliendo de la habitación

Jungkook se quedó pensando por un momento que era lo que había sucedido, pero el olor de las galletas hizo que recordara cuando quería comer una, así que cogio una y la llevó a su boca, mordió y sintió que estaba en el cielo, hace días que no había comido nada y esa galleta sabía demasiado deliciosa, la comió rápidamente y sin darse cuenta siguió comiéndose las demás hasta que se las acabo, tomo el chocolate y sintió un poco de tranquilidad, una muy extraña, tal vez parecida a la que sentía cuando el doctor le ponía sedantes para que durmiera.