Cada día que pasa te sientes más sola. Tu mejor amiga, creía que te liaste con su novio. Pero no era verdad. Ese hijo de puta se lo inventó para que tu mejor amiga te odiara.
Estas en clase, sentada en la última fila, mirando a cada uno de tus compañeros. Ahí esta el típico rubio con el pelo a medio lado que se cree el rey del mundo. A su lado se sientan sus dos amigos, siguiendole el juego. Atrás suya, la pija de clase, a la que le gusta el rubio y hace todo lo posible por que él se fije en ella. Al lado de ella se sientan sus dos amigas, siguiéndole a cada sitio que va.
Y en la penúltima fila, en la esquina, esta él. Zayn Malik. Nunca has hablado con él, pero te han contado que el otro día tuvo una pelea y dejó al otro sangrando, y se lo tuvieron que llevar al hospital. A él le dieron un navajazo al lado del ojo, por eso tiene una brecha, o al menos eso es lo que te han contado. Tu no sabes si es verdad, pero no habla con nadie.
Siempre esta en su mundo, con un cuaderno y un lápiz en la mano. Tu amiga te decía que era para planear las peleas, que ahí apuntaba todo. Pero eso no te lo creíste.
Ahora, en clase, esta con su cuaderno, haciendo algo. Siempre esta muy concentrado. Apartas la mirada.
Llega la hora del almuerzo, y coges tus cosas y te vas.
Te sientas en un pequeño muro que hay en un lado del patio, donde nadie se suele poner, y de repente te das cuenta de que no has traído el almuerzo.
- ¡Mierda!- dices, y en seguida miras para los lados a ver si alguien te ha visto. A tu derecha, a dos metros de distancia, esta él. Zayn Malik. Te mira fijamente, seguramente por lo que acabas de gritar. Sabes que todo lo que dicen de él es mentira, pero aun así no puedes dejar de tener miedo, porque igual es verdad.
Apartas la mirada, pero él te sigue mirando, con sus intensos ojos marrones.
- ¿Quieres?- te dice, ofreciéndote medio de su almuerzo, tortilla de patata. Tú le miras con desconfianza.- Tranquila, chica. ¿Te crees que te voy a envenenar o algo? Anda, _____(TN), cógelo.
Tú, sin decir nada, coges el bocadillo y lo muerdes.
- Mmm... ¡Qué rico! ¿Lo has hecho tú?
- No, mi madre. Es una experta cocinera.- y te sonríe.
Por primera vez ves su sonrisa, que te parece encantadora. Ahora que lo ves de cerca y que has hablado con él, no parece tan malo. Te ve que le estas mirando.
- ¿Qué pasa?
- Nada, es solo que... Nada, déjalo.
- Tranquila, yo también miraría a alguien así si me cuentan cosas horribles de ella. Y más si me contaran que el otro día tuvo una pelea y por eso tiene esa herida en la cara, o cosas por el estilo.- te dice. Luego añade, mirando al suelo:- La gente no sabe nada. No tiene ni idea de nada.
- Critican sin saber, y te rechazan así, sin más. Sí, la sociedad es una mierda.- dices.
Toca el timbre para subir a clase y os bajáis del mini muro.
- Yo nunca me he creído lo que han dicho de ti.- dices.
- Ya, pero por sea caso no te acercabas a mí ni para pedirme un boli.- dice, con tono triste.
La semana pasa, y llega el viernes. Solías estar en el patio con Zayn, y en clase hablabais un poco, porque estabais uno detrás del otro.
Sales del instituto y te vas a casa. Este sábado es tu cumple, pero no tenías con quién celebrarlo, así que te daba igual.
*Narra Zayn*
Se que mañana sábado es el cumple de ________, así que pienso prepararle una sorpresa.
