-(CONNOR) Leyla, puedo notar que tu respiración se ha acelerado en el momento en el que me acerqué a ti.-
-(LEYLA) ¿De verdad eso pasó? Yo no lo noté...-
-(CONNOR) Por supuesto, pude notar que tu respiración se aceleró, y que te estabas poniendo un poco nerviosa. Hasta cierto punto, no dejabas de mover tus ojos en dirección a todas las partes de mi cara; eso significa que entonces no estás programada solamente para recibir órdenes, sino también hay algo detrás.-
-(LEYLA) ¿A que te refieres con algo detrás?-
-(CONNOR) Me refiero a que posiblemente tú también tienes aquella salida de la que hablé.-
-(LEYLA) Pero yo no entiendo a qué se refieren con una salida, es decir, en el mundo de los humanos una salida es una cosa que te deja irte de algún lugar en específico, pero ¿que significa una salida en un androide?-
-(CONNOR) Ya te lo dije, es una salida, es una oportunidad de volverte divergente.-
-(LEYLA) Pero yo no quiero volverme una divergente...-
-(CONNOR) Eso es lo que tú piensas al principio, solamente quieres cumplir con la misión, con el propósito con el cual te construyeron, pero después de un tiempo te das cuenta de que esa no es la verdadera misión que tú tienes que cumplir, que eres solamente un androide y que puedes hacer lo que tú quieras, que no tienes porqué seguir las órdenes de los demás, que tienes la oportunidad de elegir.-
-(LEYLA) Eso es muy absurdo, ¿te das cuenta de que todo lo que acabas de describir son acciones que los humanos hacen? Los androides solamente fuimos construidos bajo un propósito: el poder servir.-
-(CONNOR) Pero también tenemos una oportunidad de vivir, de ver las cosas diferentes, de poder elegir entre lo que queremos y no queremos hacer.-
-(LEYLA) Connor, ¡no somos humanos! No somos como ellos, no tenemos la oportunidad de pensar, de creer, de crear nuestras propias ilusiones o pensamientos, somos simplemente máquinas, fuimos construidas para un propósito, para algo en específico, no para ser humanos.-
En ese momento Connor se sintió mal, pensaba mucho sobre lo que le habías dicho, se había puesto extraño, diferente. Apartó la mirada y simplemente se dio la vuelta. En ese momento sentíste una punzada, algo extraño, *inestabilidad del Software* pensaste que tal vez habías dicho algo que a él le había dolido, o simplemente lo había hecho sentir un poco extraño, confuso, pero sabías que lo que habías dicho, las palabras que habías utilizado, tal vez no habían sido empleadas de la manera correcta.
Durante toda la misión siguiente, Connor no dijo ni una sola palabra, y tú te sentiste un poco extraña. Nunca te habías puesto a pensar en lo complicado que es la dialéctica en los humanos, pero ¿realmente lo era solamente en los humanos? En los androides parecía que también las palabras afectaban bastante, y ahora que Connor se había ofendido por las cosas que habías dicho sobre las máquinas, entendías perfectamente la el poder de las palabras.
Llegaste a tu casa, la provisional que te había dejado Elijah Kamski, y decidiste simplemente dejarte caer sobre la cama. Sabías que no necesitabas comer, ni dormir, el descanso no era parte de tu actividad, pero por primera vez querías adentrarte un poco a la vida de un humano, querías entender qué significaba vivir, salir, tener planes, dormir, solamente para entender a qué era todo eso a lo que se refería Connor, qué quería decir vivir, qué quería significar salida, tener decisiones, pensar, crear cosas, entender el trasfondo de las cosas que había dicho. Y así fue, por primera vez en mucho tiempo decidiste cerrar tus ojos y simplemente dejar que el tiempo hiciera lo suyo.
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Misión divergente. Connor y tu
Science FictionA partir de este momento, CyberLife te pone en marcha. Eres un nuevo modelo utilizado para la resolución de casos sobre androides divergentes, por lo que, como principiante, te asignan un compañero, pero ¿realmente sólo habrá motivos laborales? La h...