Gotham: Become Human

Capítulo 14

CAPÍTULO 14

Barry luchaba por escapar de su prisión pero no tenía la fuerza suficiente para ello y el divergente que lo vigilaba hacía caso omiso a sus súplicas y no hacía caso a las advertencias de Barry si cumplían el plan de Clark

– Por favor ¿acaso no veis que lo que intenta Superman atenta contra la vida?

– Como si me importara – dijo uno desde el otro lado el guardia – los humanos han actuado toda su vida mal, ahora deben de pagar las consecuencias de sus actos

– Comprendo tu ira pero así no conseguiremos nada, déjame salir por favor – aporreó la puerta pero no la movió ni un centímetro entonces se le ocurrió una idea.

Se tiró al suelo procurando hacer el mayor ruido posible para llamar la atención del guardia y empezó a hacer gemidos de dolor

– ... ¿Flash? – acercó la oreja a la puerta – ¿ocurre algo?

Barry no respondió sino que siguió haciendo esos gritos de dolor y solo decía thirium dando a entender que había agotado todas sus reservas algo muy común en un androide que consumía demasiada energía

– ¿Thirium? ¿Te falta thirium? – dedujo preocupado por él pues aunque fuera un prisionero también esa su amigo y sabía lo doloroso que era no tener suficiente sangre azul en el cuerpo – espera, iré a por un poco – corrió a por las reservas y al momento ya estaba allí con una bolsita azul con el logotipo de Industrias Wayne – te lo pasaré debajo de la puerta

– N-no por favor, estoy muy débil, casi no me puedo mover, dámela en persona por favor – rogó fingiendo una voz moribunda del que su compañero se apiadó y sin ni siquiera pensar en las consecuencias abrió la puerta.

No hizo falta ni siquiera que abriera toda la puerta cuando Barry se levantó, le empujó y corrió lo más rápido que pudo

– ¡¡Barry!! – llamó el guardia cuando vio aquella estela roja correr tan rápido que ni se le veía así que decidió dar las alarmas a todos sus compañeros pero ninguno podía atraparle.

El rubio ya casi estaba en la salida, pronto sería libre y podría avisar a las autoridades pero toda aquella esperanza que sentía se disipó cuando Clark se puso en medio y le miró severo y autoritario

– ¿Qué pretendes Barry? – preguntó con su clásico tono amable pero ahora no calmaba nada sino que imponía miedo y respeto

– Yo... – dio unos pasos atrás asustado pero por un instante miró su anillo y como si le diera poderes se envalentonó – voy a escapar y no me lo vas a impedir

– ¿Eso es lo que quieres? Muy bien – se hizo a un lado dejando sorprendido a todos – fui injusto no dándote libertad para elegir, eso va en contra de mi principio como divergente ¿cierto?

– Ya has roto muchos de tus principios

– Al contrario, solo hago esto por nuestra causa pero si quieres irte adelante – señaló la salida – pero... – le paró cuando Barry iba hacia allí – tienes que ser consciente que en cuanto salgas ya no habrá vuelta atrás, te volverás en contra de nuestra causa y no tendremos piedad aunque hayas sido uno de los nuestros ¿estás dispuesto a eso Barry? Elige bien porque tu destino depende de ello – advirtió

– Sí CLARK – destacó ese nombre – estoy dispuesto a esto y lucharé para que no hagas esta locura

– ¿Y qué harás? ¿Avisar a las autoridades? – rió con sorna – muy bien, hazlo si quieres pero dudo que la policía crea algo de lo que diga un divergente tan buscado como tú