El día que te conocí, un día como cualquier otro, no esperaba nada especial.
Y te vi...
Una chica de cabello oscuro un poco desordenado, con una mirada serena, llena de tranquilidad; me atreví hablarte, a sentarme junto, a conocerte... esa noche conocí a una mujer maravillosa y sin igual, una mujer apasionada por la vida llena de amor y cariño, una persona como ninguna otra en este mundo, pero al terminar la noche todavía no sabía todo eso de ti, fue la segunda vez que nos vimos que te conocí como debía hacerlo.
Esa segunda vez que nos vimos, pude verte como debí haberlo hecho mucho antes, quizás el mundo nos estaba preparando para conocernos, quiero pensar que fue así, ahora luego de un tiempo conociendo cada detalle sobre ti, debo decir que...
Esa noche que me atreví hablarte, conocí, sin buscar, la Perfección...