Capítulo 5 - Día de descubrimientos

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Las miradas que se dirigían Matt y Arthur estaban lejos de ser amigables y percibía que en gran parte era por el hecho de habernos encontrado los tres de esa manera.

El primero en hablar fue Matt y agradecí por dentro que lo hiciera porque yo parecía estar bajo el efecto de petríficus totalus.

-Los dejo así hablan. Te veo después princesa.

Me dió un beso en la frente y lo sentí como advertencia para Arthur.

Cuando por fin estuvimos solos respiré profundo y decidí que no podía ser tan difícil tener una conversación con Arthur. No podía afectarme de esa manera.

-Perdón por la cita del otro día - Perdón por la salida del otro día.

Hablamos los dos al mismo tiempo.

¿Entonces para él si iba a ser una cita? 

-Perdón por lo de la cita del otro día. Te juro que no quería llegar tarde pero justo me encontré con Jazmín en el coletivo y se empezó a sentir mal y no podía dejarla sola. Me quedé con ella hasta que llegaron las amigas, Pero tardaron muchísimo en aparecer y cuando fui a buscarte ya era tarde. Era lógico que te hayas ido, tenías toda la razón del mundo. Perdón. De verdad quería verte.

Sonaba realmente apenado. Cuando terminó se quedó mirándome fijamente esperando una respuesta.

Un millón de pensamientos iban a mil por hora en mi cabeza. Para él nuestra salida iba a ser una cita, como algo romántico, no sólo amistoso. Se había encontrado de casualidad con Jazmín, no estaban juntos. Las venenosas de las amigas me habían mentido y seguramente ellas habían planeado que "casualmente" ellos dos se encontraran. Arthur quería verme y por la forma en que me miraba podía notar que realmente se sentía mal de que las cosas no hayan salido como quería. No podía estar enojada con él.

-Está todo bien, Hiciste algo bueno al quedarte con ella - Ni siquiera quería nombrarla - Ya tendremos otra oportunidad para ir a tomar un helado.

-¿Entonces no estás enojada?

-Claro que no.

-Qué alivio. Había estado toda la mañana pensando en vos y en cómo arreglar las cosas.

Esa confesión me hizo dar un cosquilleo en todo el cuerpo y sonreí automáticamente sin poder evitarlo,

-Yo también quería arreglar las cosas. No quería que nuestra amistad empezara con el pie izquierdo.

Pude notar qeu la palabra amistad no le había gustado mucho. Pero sinceramente era lo único que podía ofrecerle en ese momento.

Sonó el timbre del recreo y el patio se llenó de gente. Él se ofreció a acompañarme a dejar las fotocopias al aula mientras charlábamos.

No podía relajarme, me reía de comentarios que no me causaban gracia y trataba de parecer simpática. Todo eso de estar en pose que tanto odiaba, ahora era un fiel reflejo de mi actitud.

Cuando llegamos a la puerta del aula ví que las venenosas (lo del "sí fácil" ya les quedaba chico, eran verdaderas mean girls) estaban en el pasillo mirándonos. Un fuego me invadió el cuerpo. Habían arruinado mi cita, me habían mentido y ahora estaban ahí mirando como si todo fuera un gran show.

Siempre pienso 100 veces antes de hacer algo pero en ese momento no podía ser racional. Estaba enojada y yo necesitaba hacerles saber que no tenían que meterse conmigo porque no iban a ganar jamás.

"If you ara a player, I'm the coach", pensé.

-Me alegro que sea lunes a pesar de tener que estudiar mil cosas y tener que aguantarme a los profesores, porque por lo menos te veo a vos.

Primer Beso - Serie 'Amor infinito'Donde viven las historias. Descúbrelo ahora