El viernes llego más rápido de lo que Jimin hubiera querido, Yoongi dijo que lo llevaría a comer algo, el viaje fue de una hora, el taxi se detuvo enfrente de una gran casa de portón dorado, que Yoongi se apresuró a abrir, solo había unas cuantas casas más a los costados, y muchos árboles gigantescos, todo aquello deslumbraba los ojos del menor, entraron a la casa, Jimin admiro cada espacio en ella, no había mucha decoración solo las cosas básicas, Yoongi lo condujo hasta un pequeño salón con chimenea, en la esquina sobresalia había un hermoso piano.
-Tocas el piano- pregunto al verlo-
-sí, otro día que vengas puedo tocar algo para ti, porque hoy lo más importante es que hablemos- Jimin rodo los ojos al escuchar las presuntuosas palabras de Yoongi, asegurando que volvería-
-Según tú, de que quieres hablar- dijo Jimin sentándose mientras Yoongi colocaba una botella en la pequeña mesa que tenían enfrente-
-tu sabes de que, si no, no estarías aquí, tan fácil que hubiera sido rechazarme, pero sabes por qué estás aquí Jiminnie- explicó intentando enlazar su dedo meñique con el del menor, el otro dirigió su mirada hacia el acto del pelinegro, no actuó asustado esta vez, se mantuvo estático, intentando entender porque no podía alejarse de Min Yoongi, su cuerpo quería estar ahí, una fuerza magnética lo tenía adherido en ese sillón.
-No creo que sea lo que piensas Min Yoongi, tampoco me explico el porqué, pero confío en que se desvanecerá, debe ser por las cosas que a veces dices o haces que me siento así, pero enserio a mí no me gustan los chicos-expreso soltando el dedo del mayor, Yoongi mostro una sonrisa -
-No se trata de género, de si es hombre o mujer, se trata de lo que sientas- volvió a tomar su mano pero esta vez entrelazando todos sus dedos-¿Que sientes conmigo Jimin?
-Guardaron silencio durante varios minutos, en los que el pelinegro se dedico a acariciar la mejilla del rubio y depositar pequeños besitos en sus manos entrelazadas, los ojos de Jimin se llenaron de lágrimas un profundo llanto se liberaba en grandes ríos corriendo por sus mejillas, era uno de esos llantos con opresión en el pecho y dolor en la garganta, Yoongi sintió el amargo sabor del desastroso lloriqueo del menor, acerco el rostro del contrario a su pecho, este se encogió en ese pecho presionando con fuerza el suéter del pelinegro aun siendo incapaz de articular las palabras correctos entre sollozos dijo - me gusta, me gusta lo que siento cuando te veo... cuando tú me miras, cuando me tocas...-pauso- pero no si esto es correcto, no sé si yo deba sentir esto.
-No le haces daño a nadie Jiminnie, por el contrario estarías haciendo muy feliz a una persona si me dejas quererte- su mano acariciaba la espalda del chico que lloraba contra su pecho, al levantar su rostro, las manos de Yoongi se aproximaron a su cara limpiando sus lágrimas" sueles ser tan sexy y tierno, me encantas de cualquier modo pronuncio antes de juntar sus labios contra los del rubio, un beso sin prisas, suave, saboreando lentamente el sabor de la carne impropia, las manos del mayor se introdujeron debajo de la polera del rubio, acariciándolo suavemente, sus bocas no dejaban de entregarse a aquel vicio de lenguas fusionadas y respiraciones arrítmicas, las pequeñas manos de Jimin no dejaban de acariciar aquel rostro que tanto le había inquietado asimismo sus lágrimas aun rodaban por sus mejillas, no estaba triste, todo lo contrario estaba sorprendido de poder ser capaz de sentir la dicha que sentía con las manos del pelinegro recorriendo su espalda, y jugando con uno de sus pezones, soltó un pequeño gemido haciendo sonreír a Min Yoongi en medio de sus besos, "Me encantas Jiminnie, tan sexy, tan tierno, tan hermoso" Jimin rodeo la cintura del mayor recostándose sobre su pecho, se sentía en calma al escuchar el corazón de Min Yoongi latiendo, sus latidos eran fuertes, sus ojos se cerraban por las caricias del pelinegro en él, de pronto algo se vino a su mente exaltándole, se puso de pie dejando desconcertado al contrario, el mayor le miro con el ceño fruncido sin entender que estaba sucediendo.
-Serendipia – menciono Jimin con una sonrisa brillante
-¿Que?-
-Tu, esto, es Serendipia
-Vale, SERENDIPIA, es desear fervientemente a los rubios sexys?- Jimin entrecerró los ojos negando con la cabeza-
-Serendipia es Hallazgo afortunado e inesperado que se produce cuando se está buscando otra cosa distinta, Serendipia es Min Yoongi, es haberte encontrado sin haberlo planeado o querido, pero es realmente una fortuna que haya sucedido, porque no sabía que podía sentirme así por alguien o que mi cuerpo podía estremecerse de la manera en que lo hace cuando me tocas.
-WOW, ¿eres tu Jimin? El chico que no quería aceptar todo esto- sonrió, extendiéndole la mano al rubio invitándole a volver a sus brazos
-aun sintió cierta inquietud, pero si me sostienes así, si me abrazas fuerte podre calmar cualquier duda o cualquier miedo-le afirmo, acomodándose delante de Yoongi-
-aquí estaré, para sostenerte, y abrazarte, sigue diciéndome cosas bonitas, me gusta mucho tu voz, quizás serias buen cantante-una risa estruendosa salió de Jimin-
-claro, ya me imagino yo todo un cantante y tu mi novio rapero ¿no?, que sueñas Min Yoongi, mejor durmamos.
Ninguno de los dos había experimentado un sueño tan delicioso como el de aquel día con una presencia tan cálida al lado, y la vista tan bonita que se les presentaba al despertar, gastaron todo su fin de semana conociéndose más, enterándose de los gustos y miedos del otro, probando nuevas formas de besar, y sabores de helados, explorando sus cuerpos y saboreando las partes de su cuerpo impropio "me gustan tus manos" decía Jimin besándolas e introduciéndolas en su ansiada boca, las manos de Min Yoongi iban familiarizándose cada vez más con el cuerpo del rubio, le gustaba posarlas sobre sus redondos atributos "Tus pompis son tan bonitas y redonditas, que me dan ganas de morderlas" "Hazlo" decía Jimin muerto de vergüenza escondiéndose su rostro bajo las sabanas después de responderle, no querían que acabara el fin de semana, no sabían aun como iban a reaccionar en la oficina, no sabían si iban a poder ocultar que estaban enamorados, acordaron no decir o demostrar algo acerca de su relación, era mejor no mezclar las cosas del trabajo con su vida personal, Jimin se sintió un poco desilusionado, ahora que consentía sus sentimientos quería que todo el mundo supiera que era un poco más feliz por haber conocido a ese muchacho de piel pálida. Min Yoongi empezó a comer con los demás chicos, y se dio cuenta cuan extraordinarios eran, quedo maravillado por la inteligencia de Nam, cada día se volvió más placentero, de vez en cuando entre las horas de trabajo le mandaba mensajes a Jimin diciéndole que extrañaba besarlo, Jimin lo miraba después de mirar el mensaje dedicándole una gran sonrisa, Min Yoongi no necesitaba más para sentirse pleno.
-Min Yoongi- le dice Jimin desde del balcón de su departamento, la vista es increíble, las luces de la ciudad y su constante brillo llenan los ojos del menor, pero no tanto como la mirada tan pura de su precioso chico
-¿Qué pasa?- se coloca a su lado-
-esperaba que lo pidieras pero te estas tardando
-¿Qué es?, ¿Que vivamos juntos?
-¿Quieres ser mi novio?- saca dos pulseras similares de su bolsillo, Yoongi sonríe tapándose el rostro, y el menor sonríe al verle así, pocas veces puede provocar ese efecto en Min Yoongi, verle sonrojado, el pelinegro traga saliva sosteniendo las manos del rubio con las pulseras
-Si quiero- lo apega a su cuerpo para besarle, puede sentirlo temblar bajo su contacto, aunque ha pasado tiempo su cuerpo aun reacciona así, le beso sus pequeños ojos rasgados, la comisura de sus labios y sus lindas mejillas "Tengo mucho miedo, tanto que mi corazón late rápido"
-Min Yoongi... ¿Me amas?
-Tú sabes
-Yo sé.
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Quizas no es la mejor historia, pero esta vez me ah encantado el resultado, planeo escribir un prologo, espero pronto xD, gracias si lees♥ esto (: ten un linda día y que haya mucha energia bonita a tu alrededor, ahrre♥
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"Un tonto enamorado"
FanficCada día en la oficina de la empresa donde Taehyung un joven de 22 años es mano derecha del jefe y encargado de esta, vive contento por poder desarrollarse en un agradable ámbito laboral y logra hacer su trabajo con empeño y dedicación logrando la a...