"Un Nuevo Inicio"

Capítulo 3: ...Tu Mirada...

Eithan

–En el camión una hora antes de lo normal–

Las vacaciones no están muy lejos y estoy inundado de proyectos en equipo.

Para cuando me doy cuenta, ya eh llegado a la parada frente a mi escuela, la cual es una de alta demanda, justamente la primera opción que puse... Pero incluso con ello, con haber conseguido entrar a esa buena escuela con un buen puntaje, aún no estoy satisfecho conmigo mismo, este vacío extraño sigue en mí...

Bajo del camión y parte del equipo con quiénes estoy realizando los proyectos ya están en unas bancas situadas frente a la escuela.

-Perdón por la demora... -digo al llegar con ellos y bajando mi mochila-

Después de saludar a todos, terminamos de organizarnos y adelantar parte del proyecto.

-"Esa chica..." aún si solo es por momentos, ¿Por qué no dejo de pensar en sus ojos?... Cuándo la ví y se juntaron nuestras miradas, estuve casi seguro de que ella ya tenía tiempo mirándome... ¿será que nos conocemos...? -pensé-

Durante la escuela, tuvimos una hora libre, pues el profesor tuvo alguna dificultad y no pudo dar la clase, en esa hora, después de mirar mi cuaderno indeciso, lo hice... Dibujé su mirada tal como la recordaba.

No soy un gran dibujante, pero tampoco soy malo, o eso me dicen quienes han visto mis dibujos.

Suelto un leve suspiro y Dereck se recarga en mi hombro

–Es la primera vez que te veo dibujar ojos, ¿De quién son? –pregunta divertido-

D-de nadie... –respondo un poco sorprendido y mirándolo–  No forzosamente tienen que ser de una chi... –me detengo en seco un segundo y luego continúo-: persona...

–Dereck dió una leve risa ante ello y luego contestó–: Bueno... Yo decía...
–seguido da una palmada en mi hombro y se sienta en la banca atrás de mí– ya llegó el profesor...

–oh... Cierto. –digo mirando al maestro entrando en el salón–

El resto del día fué como cualquier otro, saliendo hasta la noche, platicar unos minutos con los chicos y luego cada quien por su lado hacia su casa, bueno, a excepción de Dereck y yo... Qué nos vamos juntos hasta cierto punto.

¿Le estaré dando muchas vueltas al asunto?

Llegando a casa, tomo el dibujo y lo llevo a mi cuarto guardándolo en un cajón.

Camino hacia la sala y veo a Kosu recostado en el sillón mirándome, voy con él y lo acarició un poco mientras veo la televisión y le hago uno que otro comentario de vez en cuando hasta que se queda dormido, regreso a mi habitación y respondo algunos mensajes antes de dormir.