New King / ChenMin

Nadie.

—¿Qué? —regresaba de platicar un poco con su hermana —Oh no —la voz angustiada de Min Seok —Bajate —sigiloso entró y cerró con seguro la habitación —¿Qué voy a hacer contigo?

Estaba de espaldas a él, pero pudo ver por el reflejo del gran espejo completo, como el roedor tenía su playera alzada dejando ver parte de su estómago y sus pantalones un poco abajo con su palpitante miembro al aire.

—No puedo estar así —veía confuso cómo su miembro se levantaba de a poco —Debo bajarlo con algo —volteaba a los lados —Pero es que —un puchero apareció en sus labios —Tan sólo de oler la almohada de Dae provocó que ¡Ah!

Unas reconocidas manos se cerraron en su cuerpo tocándolo por doquier.

—Tan sólo tienes que pedirlo —susurro en su odio para comenzar a bombear su miembro.

—Mhn… Dae… yo…

Volteo su rostro besando los delgados labios de JongDae, el cual sin perder el tiempo lo recostó en la cama y abrazó su cintura sin dejar de tocar esa suave piel, pero sobre todo sin dejar de besarlo. Pues estaban acostumbrados a hacerlo cada noche desde su apareamiento, era normal que después de casi dos días sin tocarse, besarse o tan siquiera mirarse, se sintieran hambrientos uno del otro.

Quito los pantalones de MinSeok y tocó su entrada con sus dedos. —Parece que alguien está mojado y listo para mi.

—S... sí —fue lo único que pudo articular el roedor antes de que el leopardo lo penetrara sin pudor.

—Nadie —se enterraba en su prometido apretando sus caderas —Nadie puede entrar en ti, más que yo —sus garras estaban saliendo así que rasguño más de un vez la piel de sus caderas —Nadie puede hacerte delirar de placer más que yo.

—Jong… —los ojitos de Min dejaban caer pequeñas lágrimas de placer, nunca lo habían hecho tan salvaje hasta hoy.

—Hazlo —besaba y mordía sus labios —grita mi nombre —paró los movimientos y volteo su cuerpo enterrandose de nuevo en él.

—¡Chennie!

Lo que el ratoncito no sabía era que su prometido no podía dejar de pensar lo que hubiera pasado si su padre lo vendía a alguien más.

—Agh.

¿Alguien más hubiera marcado a Min?

—No.

¿Alguien más sería el hombre de sus sueños?

—Yo lo soy.

¿Alguien más le haría el amor noche tras noche?

—¡No!

Rugió y sin aviso mordió el hombro de MinSeok llenando su interior con su semilla. Semilla que tal vez muy pronto crecería.

—¿Minnie?

Cuando su animal dejó de dominarlo se dio cuenta de lo que había hecho. La marca ya estaba hecha así que podía morder cuando quisiera, pero no lo hizo en el lugar correcto logrando sangrar un poco su piel.

Min quedó tan cansado que cayó dormido al instante aún con Chen dentro. Con mucho cuidado salió de él, lo limpió un poco, mojando una toalla con agua tibia y arropo con las cómodas sábanas de seda.

🏰

A la mañana siguiente, despertó buscando el cuerpo de MinSeok.

—Buenos días, bobo.

Vio a su hermana aún con bata de dormir, eso era extraño Yura nunca salía de su habitación hasta que ya estaba lista para empezar un nuevo día, a pesar de ser una princesa y siempre tener que vestir bien, procuraba usar los vestidos más hermosos. Aunque le costará a JongDae admitirlo, Yura heredó la belleza de su madre, tal vez por eso cuando ella no estuvo más, buscaba refugiarse entre los brazos de su hermana; cuando tenía miedo, estaba triste o simplemente porque quería recordar el amor maternal, el cual estaba más que dispuesta a otorgar a su pequeño hermanito.

—¿Y MinSeok?

—Oh, me temo que no podrás verlo —sonrió juntando sus manos sobre su mentón —Es de mala suerte ver al novio antes de la boda —susurro riendo.

—¿¡Qué!? —se incorporó de golpe.

—Así es hermanito, ¡Hoy te casas!

¡HappyChenDay! 💕

Sí, sí, ya fue 😁 pero bueno, que siga el festejo. 🎂🎉🎆🎊🎈🎁