Era un día normal, como cualquier otro. Kyouka preparaba con calma la comida, en lo que su marido llegaba del trabajo.
Kazuhiko jugaba con su peluche de conejo y tigre, junto con Byakuya. El cual lograba sacarle risas al pequeño peli-gris.
Kyouka sonrió al presenciar la escena. Quién diría que la habilidad de ella y la de su marido pudiese crear a tan peculiar espadachín.
Kazuhiko trató de levantarse, siendo su habilidad su apoyo para hacerlo; Kyouka dejó de lado la comida, apagando la estufa, dirigiéndose a su hijo; Byakuya se desvaneció, dándole paso a la progenitora de su portador.
Justo en ese momento, Atsushi entró por la puerta. Kazuhiko de inmediato quiso ir con su padre; Atsushi al notar que su hijo quería ir a él, se agachó extendiendo sus brazos hacia su pequeño.
Kyouka sonrió, sosteniendo a su primogénito de sus manitas. El peli-gris menor comenzó avanzar lentamente, con pasos tambaleantes, pero aún así no se daba por vencido.
Poco a poco la Nakajima soltó al bebé, sintiendo una enorme calidez al verlo avanzar hacía su padre. Una vez llegó a su padre, Kazuhiko sonrió y soltó una risa. Atsushi lo abrazó.
Eran esos momentos, los que Kyouka siempre conservaría en su memoria. Los momentos, en los que daba gracias por la familia que tenía.
-Traumada Taisho
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Bunnies and Tigers [Atsushi/Kyouka]
Fanfic[One-shots & Drabbles] (Sin orden cronológico) La vida diaria de los Nakajima.