La enfermera y el paciente (Jesé Rodriguez)

Nueva Vida

En su vida ha corrido tanto por los pasillos del aeropuerto en busca de la salida. Pero de pensar que son minutos que puede estar perdiendo de estar con su hija se le hacen eternos los escasos metros que lo separan del coche en el que su hermana lo espera en el parking.

- Hola hermanito, preparado para conocer al amor de tu vida??

- Patri, no te lo tomes a mal pero no he dormido y lo único que tengo ganas es de llegar al hospital y verlas

- Te tengo que contar una cosa antes de llegar... -mirándole mientras para en un semáforo- Fue Jesé quien la llevó al hospital, ella estaba esperando a Pilar pero justo llegó él y Ana no podía más

- No me importa eso... Pasó a la sala de partos con ella? -temiendose lo peor

- No, fue Pilar. A él le pidió que ni siquiera se acercase a la sala de espera del paritorio porque no sabía cómo iban a reaccionar sus hermanos si lo veían

- Ahora hablaré con ella -abriendo la puerta del coche y encaminándose a la de maternidad

- Habitación 123, planta 2 -grita Patricia a lo que su hermano solo asiente con la cabeza antes de entrar

Entra al hospital, busca en los paneles la ubicación de las habitaciones y se dirige al ascensor. Las gafas de sol a la mochila y el móvil al pantalón. Se mira en los espejos y ve su cara de cansado pero su mirada brilla. Sale del ascensor tomando aire y busca el pasillo

Pasillo 2: habitaciones 121-130

Cuando asoma por el pasillo ve a Lidia apoyada en la pared hablando por whatsapp. Como si lo hubiera adivinado, ésta levanta la cabeza y lo ve. Se acerca a abrazarlo

- Es preciosa -y sin decir nombre sabe de quién está hablando- está comiendo, la niña digo, la mami esperando

Nada más cruzar el marco de la puerta ve la imagen más bonita que ha visto en su vida. Recostada en el colchón, Ana da de mamar a Noa, de quién sólo percibe una manita que se aferra al tirante del camisón. Se acerca despacito, se agacha a darle un beso en la cabeza a Ana y ya nada hace que aparte sus ojos de ella.

- Hola amor -susurra despacio mientras le acaricia una manita y después la pelusilla rubia de la nuca

- Siento mucho lo del partido Dani -habla Ana por primera vez- hablé con Nacho hace un rato y me ha dicho que están todos súper decaídos

- No quiero hablar de eso ahora -la mira sincero- cuéntame cómo ha sido

- Espera, vamos a hacer una cosa antes -retirando a la niña de su pecho y colocándose el tirante- ven, siéntate conmigo -se echa hacia un lado de la cama dejándole hueco a Dani

- Ea, ya está. Algo más?

- Si, quítate la camiseta -afirma Ana segura - no me mires así, hazme caso

Mientras el lateral hace lo dicho, Ana le quita la camisetita abotonada a Noa que se remueve en sueños

- Toma, cógela y ponla en tu pecho -dice Ana ofreciendole a la niña. Dani con manos temblorosas obedece y Ana sólo coloca a la niña bien y los arropa con una sabanita- quería que tú también hicieras piel con piel con ella, además lo más seguro es que reconozca tu voz en algún momento

- Anda, cuéntame cómo pasó todo

- Estaba en casa tranqui y me empecé a sentir molesta, me lo tomé con tranquilidad y no quise alertar a nadie hasta no estar segura. Cuando ya vi que no había vuelta atrás llamé a Pilar pero 5 minutos antes de que llegara... Se presentó Jesé a pedirme disculpas por todo, no le hice mucho caso y sólo le pedí que me trajera aquí porque estaba de parto. No lo he vuelto a ver. Solo me han visto Pilar, Lidia y mis padres y hermanos. No he dejado que nadie más pase a visitarnos hasta que no estuvieras tú

- En serio? Y el resto de tus amigas? Mis padres vienen en un rato, pueden pasar, verdad?

- A las chicas las dije que cuando estuviésemos en casa ya tranquilas y no pusieron pega. Como no van a pasar Dani por Dios, son sus abus.

- Bueno, no oficialmente pero igual también va a tener un montón de tíos y tú y yo solo tenemos 3 hermanos entre los dos jajaja

- De eso te quería hablar también -dice Ana mirándole seria- quiero que también lleve tu apellido. Quizás no el primero pero si el segundo

- Lo dices en serio? Pensé que cómo ibas a ser madre soltera, le pondrías tus dos apellidos -responde Dani asombrado-

- Es mi forma de decirte que no me voy a ir de tu vida nunca -poniendo una de sus manos en su hombro- voy un momento al baño y vuelvo

- Te acompaño?? Y si te mareas? -dice angustiado

- Ya me he levantado hace un rato y todo bien, es sólo que igual que Noa yo también necesito cambiarme jajaja

Apenas 5 minutos después, Ana abre la puerta del baño y ve a padre e hija dormidos, sacando morritos los dos. Con sigilo les hace una foto con el móvil y sigue contestando a las felicitaciones tanto por whatsapp como por RRSS amoldándose al sillón de la habitación.

Unos toquecitos en la puerta y tres segundos después, las cabezas de Patricia y sus padres asoman en silencio

- Ey, pasad, pasad -susurra Ana

- Ay que no queríamos molestar -se disculpa la madre de Dani

- No pasa nada, estaba con el móvil y ellos están durmiendo que se lo merecen

- Y tú? No duermes? -dice Patricia

- Esta niña es una bendita, come y duerme y he dormido casi toda la noche del tirón. Estoy despejada y Dani sé que venía sin dormir.

- Hija, pues lo voy a despertar para que vaya a casa a cambiarse y luego si quieres que venga a la noche

- Espera, yo lo despierto que además a la niña ya le toca comer -dice Ana levantándose hacia la cama- Dani, ey, que están aquí tus padres y Noa tiene que comer

- Uff, cuanto hemos dormido?? -responde desperezandose- holaaa -saluda a sus padres

- Unas dos horillas, anda tira a ducharte que Noa te ha dejado sorpresita -la niña ha echado una pequeña bocanada de leche en su pecho- luego vienes a pasar la noche

Después de un rato en el que la niña va pasando de mano en mano, entre sus cuatro abuelos, tres tíos y algunos tíos postizos que han ido de visita, madre e hija se vuelven a quedar a solas para descansar

La puerta vuelve a abrirse despacio y la persona que entra sorprende a Ana, haciendo que sus ojos se abran