Invisible

4.-¿Mamá?

Salí de la habitación para dirigirme a la mía.

Zara, relájate, solo es un chico playboy más en tu vida.

Salí nuevamente de la habitación para dirigirme al living.

Lucas estaba con mi papá hablando de no sé que.

-Hija no me dijiste que tenías amigos tan agradables.-dijo mi papá sonriente.

-Él no...-me interrumpieron.
-Soy un amor.-dijo egocéntrico.
-Me cae bien.-dijo mi papá golpeando su espalda.

Puse mis ojos en blanco y caminé hasta la cocina.

-Haré la cena!.-grité.
-Gracias querida!.-dijo mi papá, yo sonreí.

Comenzé a preparar una lasagna, saqué mi celular y puse música.
Comenzó a sonar con la cantante Anne-Marie.
Cantaba la letra a mi antojo, bailaba al ritmo del compas.

Sinceramente, no sé como no rompo nada si me muevo tanto.

-Hija! Iré a buscar a Katherine!.-dijo desde el living.
-Bueno! Cuidate!.-contesté.
-Lucas se quedará a comer, asi que, en el rato que no estoy, no piensen hacer cosas cochinas.-dijo mi papá en la cocina.
-Papá!.-chillé.
Le lanzé una esponja y salió corriendo.
Escuché la puerta cerrarse, yo seguía con mi música y por un momento, me olvidé de todo, estaba concentrada en cocinar mientras oía la letra.

Me dí vuelta y ví a Lucas mirándome, desde el marco de la puerta, de una manera inexplicable.

Lo ignoré y seguí haciendo lo mío.

Cuando ya lo metí al horno, salí de la cocina, pasando por su lado.

Me senté en el sillón y miraba instagram.
Sentí como se sentaba al lado mío.

-Oye.-dijo y lo miré.
-¿Has tenido novio?.-dijo y yo lo miré perpleja.
-¿Que pretende el señor Miller?.-dije burlándome de él.
Él rió mientras yo seguía esperando la respuesta.
-Me parece raro que una chica como tú, no tenga novio.-dijo bastante, coqueto.
-¿Extraño?.-dije.
-Si, demasiado sexy.-dijo y yo quedé en blanco.
-Eres un imbécil.-dije molesta.
-Hey, tranquila.-dijo sonriente.
-No, no puedes decirme que me tranquilize, estás acostumbrado a tener todo lo que quieres.-dije parándome del lugar, caminé pero él tomó mi brazo y me dió vuelta.
-Dilo.-dijo y yo lo miré confundida.
-Dí lo que piensas.-dijo neutro.
-Eso, eres el típico chico playboy que le coquetea a todas porque quiere tenerlas a todas, y creeme, le quitas el brillo a el asunto.-dije dándole una sonrisa sarcástica.
-Chico playboy, me gusta como suena.-dijo arrogante.
-Eres imposible.-dije poniendo los ojos en blanco.
-Admíte, que te caigo bien.-dijo y yo levanté una ceja.-un poquito.-dijo tierno.

No, Zara, lo odias.

No dije nada, solo me salí de su agarre para poner la mesa.

-Mm, lo tomaré como un sí.-dijo y yo reí, este chico es increíble.

-Llegamos!.-gritó mi papá.

Ay no, Katherine, la bruja a llegado.

-Hola.-me saludó Katherine. Ella miró a Lucas y su rostro cambió.
Se volvió tenso, su mirada era, extraña, como si tuviera miedo.

¿Desde cuándo que una bruja tiene miedo? ELLA CREÓ LA PALABRA Y EL SIGNIFICADO DE MIEDO.

-Hola señora Adams.-saludó Lucas cortesmente.
-Hola.-dijo ella sin mirarlo a la cara.
-Bien, sentémonos a comer.-dijo mi papá.
-Iré por la comida.-dije para luego entrar a la cocina y sacar la comida.
-¿Te ayudo?.-preguntó Lucas desde el marco de la puerta.
-Eehh...-dije poniendome una mano en el mentón mientras miraba la cocina.
-Si, saca unos platos, están ahí.-dije apuntando y él miró.
No dijo nada, solo lo hizo.
Dejó los platos en el mezón mientras se apoyaba en él.
-Gracias.-dije partiendo la lasagna.
Creo que el tiene esa costumbre de no decir "de nada".
PORQUE NO DIJO NADA.