What Makes You Beautiful_Harry Styles

Cap 12. Eres perfecta para mí

Estiré el brazo para abrir la puerta, pero él puso el seguro automático.

-Bella, no me ignores. -Yo no podía mirarlo a los ojos. Al ver que yo no decía nada empezó a hablara - No quiero verte sufrir, puedo entrar en tu mente pero no la comprendo. Dime qué te pasa, por favor. No puedo verte... -La única forma que se me ocurrió para callarlo fue besarlo, él siguió el beso. Abrí los labios para que su lengua entrara en mi boca y eso hiso, nuestras lenguas bailaban una sinfonía que sólo ellas escuchaban. No quería separarme de él, pero la cabeza empezó a darme vueltas. Caí hacía él, pero no inconsciente.

-Bella... así como eres, eres perfecta... para mí. -dijo con una sonrisa y voz entrecortada.

-Te amo... más que a mi propia vida. -eso hiso que sus ojos brillaran aún más.

Cuando ambos recobramos el aliento él dijo:

-Creo que hay que decirle a tus padres.

-¿Qué cosa?

-Lo nuestro.

-Creo que mamá ya sospecha algo.

-Sí, pero dudo que se enfade.

-Ella te adora. -se rió.

-Qué mal que ya tengo novia. -sonreí al escuchar la palabra.

Bajamos del auto, él llevaba ambas mochilas, y antes de entrar le dije:

-¿Puedes controlar ese brillo en los ojos? -él se rió.

-¿Por qué? ¿No te gusta?

-Todo lo contrario... me encanta. Pero intenta controlarlo con mis padres presentes.

-No te prometo nada, él único que controla sus ojos es Niall.

-De acuerdo, entremos. -entrelazó nuestras manos antes de que yo abriera la puerta, yo estaba muy sonriente.

Mamá y papá estaban en el living, hablando. Cuando llegué ambos miraron nuestras manos entrelazadas y yo les sonreí. Abrí la boca para comenzar, pero Harry se me adelantó.

-Sarah, Peter. Tengo que decirles que estoy enamorado de su hija y desde que ella ha aceptado ser mi novia, finalmente hallé sentido a mi vida. -Se miraron entre ellos y se pusieron a reír.

-Oigan, es enserio. -dije yo algo molesta.

-Lo sabemos, Bella. -dijo mamá- Sabía que algo pasaría, cuando Harry te vio bajando las escaleras... ese brillo en los ojos lo decía todo. -me sonrojé y Harry le brillaron los ojos.

-Así que todo está bien. -dijo Harry sonriendo.

-Claro, pero si lastimas a nuestra hija... -dijo mamá.

-No te preocupes, Sarah. Eso nunca pasaría. -le prometió.

-¿Fue tan incómodo para ti como para mí? -dije mientras subíamos las escaleras.

-No lo sé. -dijo riendo- ¿Cómo no te diste cuenta?

-¿De qué?

-La noche en que nos conocimos. ¿Cómo no notaste que no te quitaba los ojos de encima? -me encogí de hombros. Él se rió.

-¿Era por tus zapatos? -dijo riendo, al ver que yo recordaba lo concentrada que debía estar esa noche.

Él sacó un cuaderno de su mochila.

-¿Qué es eso? -pregunté, pero él cerró el cuaderno para que yo no viera.

-Creí que no habría secretos entre nosotros. -él suspiró.

-Es lo del club y no diré nada más. -¿Por qué no querrá que lo lea? pensé.

-Porque no está listo. -respondió.

Me reí al recordar el aspecto de Harry en la cafetería.

-¿Qué pasa? -preguntó contagiado por mi risa.

-Mi novio es un celosito. -sus ojos se iluminaron cuando dije novio.

-Y mi novia es una pastorcilla mentirosa. -me sonrojé cuando dijo novia. Una lágrima de felicidad cayó por mi mejilla, lo abracé y me refugié en su pecho.

-¿Qué pasa?

-Nada, estoy feliz. -dije sonriendo- Gracias...

-¿Por qué?

-Por llegar a mi vida. Prométeme que te quedarás para siempre.

-Para siempre, mi Bella.