Harper Uley es la media hermana de sam,ella vive con su madre en forks ,sufre de maltratos por parte del esposo de su madre.
Su vida dará un giro de 180c al convertirse en mujer lobo y conocer al chico tímido:Embry Call...
Al dia siguiente,me desperté con ánimos y por el delicioso olor a comida.
Me meti al baño para darme una ducha, después de 15 minutos, salí y fui al armario para buscar algo cómodo para ponerme.
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En la planta baja oi las voces de la manada, tome mi celular, salí de mi habitación y con rapidez baje las escaleras, al entrar al comedor vi a toda la manada devorando, literalmente,la comida.
-Buenos días-dije,sentandome junto a Embry, con una sonrisa.
-Buenos días Harper-dijeron todos al unísono.
-Buenos días harp-dijo Emily poniendo frente a mi un plato de Hot cakes con cajeta y un vaso de jugo de naranja.
-Bueno después de clases, embry, seth y Harper harán guardia, ayer Paul y ashley encontraron un rastro de la vampiro pelirroja dirigiéndose a Canadá, por lo que ahora mas que nunca debemos estar alertas.
-Como digas Sam/hermano.
-Esa sanguijuela es demasiado escurridiza,esta comenzando a fastidiarme-dijo Paul,con frustración. -Tranquilo lobito.
-Si Paul, tranquilizate-dijo Jared,con una sonrisa.
Después de esa charla,desayunamos con rapidez, puesto que se estaba haciendo tarde, terminando todos dé desayunar, tomamos nuestras mochilas y subimos a los autos, para asi dirigirnos al instituto.
Sinceramente estaba un poco nerviosa, ya que después de 2 semanas, les volvería a hablar a mis amigos.
Embry noto eso y puso una de sus manos en mi hombro, mientras me sonreía, el estaba de copiloto y yo de piloto, ya que este era mi auto.
-No te preocupes harp,nosotros estaremos contigo.
-Si harp,puedes contar con nosotros-dijo Ashley con una sonrisa,junto a ella estaba Paul y junto a Paul estaba Quil.
Yo solo los vi con una sonrisa de agradecimiento, para después volver la vista al frente.
Minutos después, ya nos encontrábamos aparcando,bajamos de los autos con las miradas de los demás puestas en nosotros, pero cuando fijé mi vista en la entrada del instituto mis nervios volvieron a invadirme.
Mis amigos estaban sentados en la entrada, con expresiones aburridas, pero cuando me vieron la tristeza los invadió.
