Renacer

Día 3: eres mucho más que todo esto

Tú no eres la marca de tus zapatillas.

Tú no eres el té chai que acabas de hacer en el microondas.

Tú no eres la cena pre-cocinada de anoche.

Tú no eres las faltas de ortografía que cometes.

Tú no eres tu cara de sueño a las 7 a.m.

Tú no eres el tiempo que tardas en quedarte dormida

ni las preocupaciones que ocupan tu cabeza.

Tú no eres tu actividad sexual.

Tú no eres tu número de amigos,

ni el número de amigos que perdiste.

Tú no eres la incomprensión de tus padres a veces.

Tú no eres tu preferencia hacia azúcar o sacarina.

Tú no eres la tienda de ropa en la que sueles comprar

ni la playlist de Spotify que te acompaña cuando lloras.

Tú no eres los arañazos que te hicieron a las 7 años.

Tú no eres la huella irreparable que dejó en ti tu primer amor.

Tú no eres tu carrera universitaria.

Tú no eres el número de voluntariados que has hecho en tu vida.

Tú no eres la cantidad de gente que te sigue en la red.

Tú no eres el porcentaje de amantes que te cogieron la mano.

Tú no eres los domingos de lluvia.

Tú no eres la culpabilidad que sientes tras haber hecho daño sin querer.

Tú no eres 4 meses cuesta arriba en tu existencia.

Tú no eres la necesidad de ayuda psicológica.

Tú no eres los "es que no puedo con esto"

ni los "me he quedado sola".

Tú no eres el miedo a los desconocido.

Tú no eres la niña de la que todos huyen.

Tú no eres la debilidad ni los ojos cerrados.

Tú eres mucho más que todo esto.

Tú eres mucho más que todo esto.

Tú eres mucho más que todo esto.

tú eres una ciudad en ruinas.

Una ciudad con vistas al mar,

en proceso de construcción.