Narra Samuel:
-¿Estas bien, Willy? –Acaricie su cabeza con delicadeza, revolviendo un poco su cabello-
-¡No me puedo mover! –El seguía tumbado sobre la cama, prácticamente inmóvil- Me duele todo…
-Bueno… No te puedes quejar, fuiste tú quien quería que lo hiciese –El hizo un esfuerzo, agarro un cojín que tenía cerca y me lo lanzo-
-¡Cállate! –Se sonrojo completamente, así que no pude evitar reírme-
-Está bien, lo siento. –Simplemente era demasiado lindo. Me agache hasta quedar a su altura y entonces le di un beso en los labios- Tengo que irme al instituto, ¿está bien? Tú quédate aquí y descansa.
-No… Quédate, Samu… Quédate conmigo… -Agarro la manga de mi uniforme, mientras me miraba con una carita muy tierna-
-No puedo Willy. –El hizo un puchero y me miro con ojitos de cordero. Pero al ver que no funcionaba, hizo un esfuerzo enorme por ponerse en pie- ¿Qué haces? –Me acerque a él para ayudarlo a levantarse-
-Yo también voy. –Dijo muy seguro de sí mismo, aun que a duras penas se podía poner en pie-
-¿Estás seguro?
-Sip.
Se preparó y poco después salimos de casa. Cerré la puerta con llave. Subimos un par de pisos, para ir a buscar a Luzu e ir juntos al instituto. Pero al llegar ahí y picar a la puerta nadie respondió. ¿Se había ido primero? Bueno, supongo que sí.
Al llegar al instituto, justo en la puerta, estaba Luzu. Grite su nombre y él se giró hacia mi dirección. Me saludo con la mano y una sonrisa, aun que tenía mala cara. Me acerque corriendo a él.
-Hey –Dijo Luzu-
-H-hola. Oye… ¿Te encuentras bien? Tienes unas ojeras enormes –Dije preocupado-
-Sí, sí. Tranquilo. Es solo que… Bueno, no eh dormido precisamente bien.
-Oh. Deberías descansar más.
-Es cierto –Dijo Willy- De verdad tienes muy mala cara –Él nos miró y se rio-
-Lo mismo digo. Bueno, ¿vamos?
-C-claro.
Entramos en la clase y nos sentamos. Alex también estaba ahí, como siempre, rodeado de chicas. Me sorprende lo popular que es. Al darse cuenta de que estábamos ahí, nos saludó con una sonrisa y se acercó, sentándose con nosotros.
-Buenos diaaas –Dijo el con una enorme sonrisa. Entonces miro a Luzu- ¿Qué te pasa Luzu? Parece que te han chupado la sangre o algo. Estas como un fantasma.
-Hay, Alex. Si tú supieses… Solo déjame echarme una siesta. -Alex me miro confundido, yo solo fruncí los hombros y negué con la cabeza-
Estábamos en plena clase, y a un chaval le hicieron una pregunta, la cual no respondió. La profesora impaciente se acercó a su pupitre, gritando su nombre. Al parecer se había quedado dormido. El chico se puso muy nervioso, casi parecía que iba a romper en llanto en cualquier momento. Todos comenzaron a reírse y el chico salió corriendo de la clase, ignorando los gritos de la profesora.
-Parecéis gilipollas- Dijo Alex en un tono bastante bajo de voz, pero lo suficientemente alto para que todos lo oyesen. Al instante se hizo el silencio. La profesora continuo con la clase como si nada hubiese pasado. Lance un papelito al pupitre de Alex, en el que ponía: “Eso ha estado bien”. El no respondió nada, solo sonrió un poquito. Me pregunto cómo estará ese chico… Decidí despertar a Luzu, no quería que le echasen bronca a él también.
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El día en que mi vida cambio WIGETTA (SinFinalizar)
FanfictionEsta es la historia de un chico llamado Samuel. Sufre de bulling en el instituto a causa de una declaración que le hizo a un compañero y se ve forzado a subsistir solo desde muy temprana edad a causa de la repentina muerte de sus padres. Pero que pa...