CRUSHED: ¿Amistad Terminada?

Capítulo 3 - El lado oscuro

Max Pov.

Casey me sacó de esa horrible fiesta. No debí besar a Jackson en serio, sé que esto va a traer cosa que no quiero entre nosotros. Aquí es donde dicen "ni dibisti dirli ilis" y eso. He estado ignorando cada señal que me ha mandado por cinco semestres. Y me resbalo en una fiesta que no quise estar, y donde además estaba Gabe Anderson. Espero que no me haya visto.

—Vamos a la parte oscura de la cuidad—me dijo Casey. Pasamos un poste de luz graffiteado, que no tenía luz por cierto—. Bienvenida.

Miré a mi alrededor.

—En realidad es muy oscuro.

Pues no había mucha luz. Por lo visto las compañías de electricidad no se pasaban mucho por este lado. Por los graffitis, a esto le llaman el "Down Side" pero recuerdo que Casey me dijo que nombre de este lugar, no recuerdo.

Nos bajamos el taxi y Casey comenzó a caminar muy rápido hasta la puerta y luego la cerró como si estuviera escapando de algo.

—La seguridad ante todo.—aclaró.

Asentí como si la entendiera.

Subimos un par de pisos por la escalera porque el ascensor no funcionaba. Vine aquí muchas veces cuando recién comenzabamos la universidad y yo vivía aterrada. Cuando me acostumbré a estar sola en la resistencia deje de venir. Sin embargo, nunca había llegado de noche.

Ella abrió la puerta de su apartamento.Y su madre literalmente estaba justo ahí esperandola.

—¡Maxim, preciosa! Dios te bendiga.—y me abrazó.

—Dios te bendiga a ti también, amada hija—dijo Casey dramática—. Me alegró de verte por aquí, te vez tan linda...

—Dios te bendiga a ti también.

Y Casey hizo mueca de complicidad.

—¡Max besó a un chico en la fiesta!—y corrió hasta su habitación.

La madre de Casey se puso las manos en la cintura. Suspiré.

—El alcohol juega conmigo.

La familia de Casey es muy diferente a la mía, más cálida de cierta forma. Vienen de Orlando, Florida, y sus padres, si no me equivoco vienen de Venezuela. Coincidimos en tener familia extranjera, la mía de Alemania. Con los problemas de la Guerra llegaron aquí, hace ya mucho tiempo.

—Estoy tan avergonzada con tu mamá—le dije cubriendome el rostro con su almohada.

Estábamos sentadas en su cama. Su habitación me hacía sentir de dieciséis otra vez. No había quitado ningún póster desde Riot de Paramore hasta el último de Harry Styles. No entendía por qué, pero me sentía extrañamente a gusto.

Casey tomó un sorbo de jugo mientras se burlaba en silencio.

—Ya enserio—se lamió los labios—. Pudiste haberle pedido la taxista que te llevará a su casa ¿Por qué insististe en quedarte aquí?

Hice una mueca, dejando la almohada a un lado.

—Creo que... esta es una de esas noches en las que no quiero estar sola.

Ella sostuvo la mirada.

—Mientras esté aquí nunca lo estarás, tonta—aquí viene—. ¿Es por... Jackson?

Me dejé caer de lado.

—No debí hacer eso. Sé que le gustó—abracé mis piernas—. Pero ahora pienso en Gabe. Mark es lindo pero... tu sabes. En cambio él es interesante, profundo y...