Todos los genios tienen algo de locos!

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- ¿podemos no tener sexo hoy? - no podía negar que la pregunta fue sorpresiva.

Algo lo sacudió en su interior, volvió a  abotonarse de nuevo la camisa antes de que su ángel lo detuviera.

- o...ol...olvídalo ¿no estás enojado conmigo cierto? - la mirada de pánico en sus ojos y sus manos aferradas a los puños de su camisa le preocupo demasiado.

- ¿Por qué estaría? - ¿acaso por eso era que tenían siempre sexo? - ¿Jeonghan? -

- lo lamento, por favor no te enojes conmigo - tenía lágrimas a punto de caer.

- no estoy enojado, no contigo - lo hizo sentarse en la cama - solo quiero saber ¿porque crees que estaría enojado por algo como eso? -

- yo...no, yo solo... - ahora ni siquiera sabía realmente que era lo que esperaba, solo quería que Seungcheol lo quisiera, era estúpido ya que lo sabía pero necesitaba estar completamente seguro.

- no haremos nada que no quieras - se sentó a su lado en la cama, tomo suavemente su barbilla y lo hizo mirarlo - ¿crees que solo quiero sexo contigo? - por favor que no crea que soy esa clase de persona...

- no... - el menor tragó saliva - ¿pero a ti te gusta no? -

- si... - no era una mentira le fascinaba su cuerpo, besarlo, lamerlo, morderlo...Dios tener su pene dentro y empujar en él hasta... - pero no es tan necesario - estar a su lado era lo mejor de su mundo.

- solo quiero hacerte feliz... - no había nada que no quisiera de su dulce ángel.

- ya me haces inmensamente feliz - y era toda la verdad.

- solo, no quiero que me dejes... - un sollozo escapó de los suaves labios de su ángel.

- ¿Por qué piensas que te dejaría solo por negarte a tener sexo o cualquier otra cosa? - De pronto se sintió enojado al recordar al sujeto anterior que menciono el rector, aquel que había tratado tan mal a su precioso ángel...y aún más enojado porque él mismo en un tiempo solo pensaba en su cuerpo, no negaría  que lo volvía loco tocarlo, pero nunca podría dañarlo, usarlo o exigirle algo como eso...su amor por él era verdadero - si es por el antiguo novio que tuviste, yo no soy él y no haría algo tan idiota como para alejar al ser más perfecto que e conocido hasta ahora - limpio las lágrimas que caían, pero parecían incrementar - ¿Qué sucede? -

- yo no soy así... - si el profesor Choi supiera que no había nada dulce ni bueno en él ya nunca lo amaría...

- ¿a que te refieres? -

- a que no soy un ángel, ni perfecto...yo... - las lágrimas aumentaron consecutivamente.

El mayor estaba un poco asustado por ver el estado de su novio, no sabía que estaba pasando por su mente, no podía ser bueno si lo ponía de esa forma.

- vamos bebé, dime que sucede - su voz se volvió suave y sus manos acariciando su espalda lo reconfortaron un poco, Seungcheol se merecía saber que no era quien creía.

- yo... - el profesor Choi volvía su expresión cada vez más seria, su bello ángel empezó por decirle como planeo que su padre lo pusiera como su tutor, lo mucho que intento seducirlo para para no sentirse solo, pero eso no era por lo que su mandíbula dolía, el hecho era que su precioso Hannie empezó a relatar lo que había pasado con su anterior novio y eso le hacía girar las tripas de la pura rabia...resultaba que aquel imbécil no solo lo utilizaba para obtener lo que quería, si no que indujo a su dulce y bello ángel a un mundo de alcohol, drogas y sexo, no podía imaginar eso, mucho menos cuando era claro que eso era a penas unas pocas cosas que sucedieron en su pasado - yo...yo creí que lo ama y también creí que me amaba...así que... - la habitual sonrisa en el rostro de su amado profesor se había esfumado, por supuesto ¿Quién querría a alguien tan estúpido a su lado? ahora se sentía más avergonzado, mucho más que cuando sus padres descubrieron las marcas de golpes en su cuerpo, mucho más que cuando Kwannie lo miraba con lástima y enojo por no poder alejar a quien "amaba" incluso si le hacía daño...mucho más que cuando se miraba al espejo y no sabía quien era el que lo miraba del otro lado.

Dulce tentaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora