La llave de la felicidad.

La verdadera felicidad.

La sociedad en la que vivimos, lamentablemente, va de mal en peor. No por la economía, ni tanto por la política, sino por el tipo de personas que hay, y las cosas que hacen. La mayoría de personas buscan la felicidad, se sienten vacíos y por eso lo buscan. Yo soy feliz, y te quiero dar la llave de la felicidad para que puedas ser feliz conmigo. En una palabra, te digo quién te puede ayudar: Jesús. Él es tu amigo. Está dispuesto a escucharte SIEMPRE. No importa que pase, no importa que hayas hecho. El siempre va a estar ahí, para darte un fuerte abrazo.                                                                            

 EL MUNDO te ofrece el "ver para creer", pero Él te brinda muchísimo más. Te da el "creer para ver" que nadie más te va a poder dar. Humanamente, es imposible de entender cómo alguien como Él pudo hacer todo el sacrificio que hizo por algo tan insignificante que es una persona. Ah, no sabes qué hizo? Te explico: Dios mandó a su único hijo, Jesús, a la Tierra; que fue creada por Él. Lo hizo humano. LO HIZO HUMANO! O sea, un ser tan perfecto, se convirtió en humano. Y murió. Murió sin culpa. Vivió una vida total en santidad en la Tierra, no pecó jamás. Pecar es hacer lo malo, lo que a Dios no le agrada. Significa que NO cometió ningún pecado, que son maldades. NUNCA. NO pecó JAMÁS. Y aún así murió. Y muchos piensan que le "quitaron la vida" pero, sabes que no? No le quitaron a vida, Él la entrego solo. Y, vos sabes por qué murió, si no tenía ni una culpa? Por vos y por mí. Porque alguien tenía que pagar los pecados, las maldades, de todos nosotros. Porque no existe ser humano que no haya cometido pecados, exceptuando a Jesús, cuando se convirtió en uno.  Y si, vos y yo tendríamos que haber estado colgados en una cruz, y morir. Pero Él nos amo tanto, tanto, tanto, que no quiso que muriéramos. Quiso que vivamos. Nos dio vida, y nos la dio en abundancia. Pero ahí no terminó la historia. No murió y ya está. Murió y, al tercer día de estar muerto, resucitó. Revivió, por así decirlo. Y demostró que Él tuvo, tiene y tendrá todo el poder para hacer todo lo que se le plazca. Y no resucitó solo para demostrar que es todopoderoso, sino que también lo hizo para vivir por siempre con nosotros, cuidarnos y ayudarnos en todo. Y todo esto no es un simple cuentito, pasó de verdad. Lo dice la Palabra de Dios (la Biblia), cuyas palabras son pura verdad. Jamás vas a encontrar una verdad tan verdadera como la Biblia.                                      

Y si aún así no lo crees, te recuerdo lo que antes dije; Creer para ver.                                                

Yo no sé si tenes o no hijos, no se tu edad, no se nada de vos, pero sabes lo que es perder a tu hijo? Imaginatelo así. Vos tenes un hijo y es el único que tenes. Vos trabajas moviendo las vías de un tren, y tu hijo quiso ir a ver cómo son. Pero, de pronto, tu hijo se cae en las vías, se engancha, y no puede salir. Y el tren se está acercando. Y tenés que mover las vías para que el tren no caiga por un precipicio. Vos qué harías? Salvarías a tu hijo, pero matarías al resto de las personas, desconocidas para vos, claro. Ó, salvarías a las personas, pero perderías a tu hijo? Bueno, Dios decidió perder a Su hijo, que era totalmente limpio de pecados, por vos. Por mí. Por todos en el mundo. Pero, sabes cuál es la diferencia del ejemplo que te di y Dios? Que Dios sí sabe absolutamente todo. Te ve y cuida minuto a minuto. Y te ama. Muchísimo. [Ver ejemplo en video "El Puente | Reflexión |El Amor de Dios por el Mundo" Canal de Youtube: ElitedeDios.Net, lo dejé aquí al lado, en la derecha]                             

 Y ahora volvemos con la sociedad. Si Dios no te estuviera cuidando, ya hubieran pasado muchísimas cosas. Pero MUCHÍSIMAS. Si Dios no me estuviera cuidando, puedo asegurar que yo ya no existiría. Nadie ni nada existiría. Porque Dios es FUNDAMENTAL para nosotros. No conocías a Dios? No creías en Él? No crees aún? Mira, vos nunca sentiste un vacío adentro tuyo? Que quisiste probar muchas cosas para ser feliz, pero no lo conseguiste. Lo puedo asegurar. Porque si no tenes a Dios, tenes un vacío inmenso. Que queres llenar con alcohol, tal vez drogas, o tal vez sin ir más allá: algún vicio. La computadora, por ejemplo. El celular. O lo que sea que se pueda considerar un vicio. Pero, a pesar del vicio no lo podes llenar, y lo querés llenar. Pero no sabes cómo.                                                                                                                                                                        

Bueno, ya mismo te doy la solución: Dios. Cuando fuiste creado por Él, tuviste ese espacio en tu corazón, que era destinado a Dios. Y por eso sentís vacío, porque Él no lo está llenando.

Querés que lo llene, y tampoco sabes cómo? Tenes que orar. Si no sabes cómo, acercate a una iglesia, la primer iglesia evangélica que te esté más cerca. No podes por algún tipo de razón? Podes orar en cualquier lugar. Ahora, en tu casa, mirando la computadora. O tal vez, mirando el celular. En el colectivo, en el trabajo, con los ojos abiertos, con los ojos cerrados, con las manos juntas, con las manos sueltas, sosteniendo un café, cepillándote los dientes, bañandote. En CUALQUIER lado, a CUALQUIER hora, de CUALQUIER forma. Tan solo tenes que hablar. Hablarle a Dios. Contarle lo que te pasa, pedirle ayuda, pedirle que entre a tu corazón, que sea tu amigo, que te acompañe por el resto de tus días. Que te ayude a buscar trabajo y encontrarlo, que te ayude a cuidar a tu familia, que te ayude a ser una mejor persona. Y Él, te va a responder. Tan solo tenés que terminar con "En el nombre del Señor Jesús, amén." Sabes por qué? Porque en la Biblia, Jesús dijo que cada vez que le oremos al Padre, que es Dios, oremos en Su nombre. Por eso decimos "En el nombre de Jesús", y.. Sabes que significa "Amén"? Significa, 'Que así sea.' Entonces, es como afirmar todo lo que antes dijiste. Orar, también está para agradecer. Agradecerle a Dios por tu vida, por cada segundo que te permitió respirar, por tener una casa en donde dormir, por tener familia, por tener amigos, por tu  trabajo, por la escuela, quizá. Por todo lo que tenes. Orar es hablar con tu verdadero amigo, un amigo de fierro, el mejor amigo que podés tener: Dios. El te va a escuchar y, sabes que también responde? Si, el responde. Solo tenes que abrir la Biblia, y saberlo escuchar. Aparte, una vez que vos lo invitaste a vivir en tu corazón, no solo es tu amigo, y entra en el, sino que Dios se convierte en tu Padre, y todos los demás cristianos en tus hermanos; tenes una nueva familia, que te apoya y ama!

La llave de la felicidad, sin más rodeos, es DIOS. Y con Él, te aseguro que vas a alcanzar la felicidad plena y verdadera. Y, sabes que cuando aceptas a Jesús en tu corazón, es una vez y para siempre? O sea que, haciendolo tan solo una vez en toda tu vida, el ya está allí y no te deja nunca más. Esto no te promete no tener problemas, todos los tenemos. Y es más, vas a tener los mismos y tal vez algunos mayores que los que te rodean, pero.. Sabes qué? No hay nada como atravesar un problema con un amigo. Y Jesús es el MEJOR de todos, Él te va a ayudar y jamás te va a soltar ni desamparar. Al igual que la felicidad. Por más que estes en problemas, solo estar con el, te da felicidad. Tal vez estes llorando, pero sos feliz igual, porque tenes paz. La paz que solo Él te brinda. Y todo esto lo encontras una vez, lo aceptas, y es para siempre.

 Así que, te invito! No te prives de las bendiciones que podes recibir, y de ser salvado hoy y ahora.  

"Porque de tal manera amó Dios al mundo que ha dado a Su Hijo unigénito para que todo aquel que en Él crea no se pierda, más tenga vida eterna." Juan 3:16, la Biblia. 

[A Él sea la gloria, la honra y el poder.]