The Cure (KookMin/TaeJin)

Paciente 104

La luz del amanecer se colaba por las persianas chocando directamente contra el rostro de un joven pelirosa, este al sentir aquella molesta luz decidió girarse en su cama cubriéndose con las sábanas; poco a poco abrió los ojos observando la hora, al percatarse que pasaban de las ocho de la mañana se levantó de golpe, era raro despertar a esa hora, normalmente se levantaba más temprano para tomar clases con un profesor privado que llegaba a su hogar.

-¿Papá? ¿Mamá?- llamó a sus padres con curiosidad, no comprendía porqué le habían dejado dormir hasta esas horas.

Al no obtener respuesta alguna, el joven pelirosa se levantó de su cama y se encaminó a la puerta, comenzó a bajar las escaleras escuchando algunas voces en la sala, al no reconocer ninguna de ellas su cuerpo se paralizó. ¿Quienes eran los que se encontraban en su hogar?, Su corazón comenzó a acelerarse y su respiración se volvía errática, estaba aterrado de quien sea que se encontrase en la sala.

De pronto, logró reconocer la voz de sus padres, esto le hizo calmarse un poco, continuó bajando hasta quedarse al pie de las escaleras; el joven se asomó con lentitud observando a tres hombres sentados en el sofá. Tragó saliva con nerviosismo, a Park Ji-min le aterraban las personas nuevas, incapaz de verles a los ojos o entablar una conversación, evitaba a toda costa hablar con personas nuevas; todo era culpa de la extraña condición que padecía.

De pronto escuchó unos pasos venir hacia él, su cuerpo se tensó y comenzó a sudar frío, Jimin se quedó estático hasta ver como sus padres se dirigían a él, solo de esa manera logró recuperar la compostura.

-¿Que ocurre?- preguntó el pelirosado con curiosidad.

-Hijo, lamento que tengas que enterarte así pero tu padre y yo hemos tomado una decisión- mencionó la mujer mayor tomando las manos de su joven hijo.

-Nos dimos cuenta de lo complicado que es para ti el convivir con las personas, no hay problema mientras nosostros estamos aquí pero... ¿Que sucederá cuando llegue nuestra hora de partir?, No nos perdonaríamos el hecho de que te quedes solo con esta condición, ¿Que será de ti?- comentó ahora el padre del joven.

-Yo... No lo entiendo- respondió Jimin aún más confuso, ¿Que querían decir sus padres? ¿Quiénes eran esas personas?.

El joven de labios gruesos estuvo a punto de hacer preguntas pero un par de hombres le hizo paralizarse y bajar la mirada de inmediato. Una voz desconocida le hizo temblar, pero más aún las palabras mencionadas.

-Joven Park Ji-Min, lo que tus padres intentan decir es que quieren ayudarte a superar tu temor, es por eso que nosotros estamos aquí, en nuestras instalaciones vamos a darte apoyo y hacerte superar tus temores, todo estará bien así que te pido de la forma más amable que vengas con nosotros- el hombre responsable de dicho lugar sonreía de manera amable e intentó tomar la mano del pelirosa.

-¡No!- Jimin retrocedió inmediatamente y estuvo dispuesto a correr hacia su habitación, pero le fue imposible, ambos hombres le sostenían por cada extremidad.

-Sus padres confían en nosotros, joven Park, si no se tranquiliza me temo que tendremos que usar medidas más extremas- aclaró el hombre con su mirada sobre el más bajo.

-¡Alejense de mi!- gritó aterrado entre bruscos movimientos para soltarse del agarre, en todo momento mantuvo los ojos cerrados, estaba asustado.

Los hombres le sostuvieron con firmeza hasta que uno de ellos comenzó a colocarle una camisa de fuerza. ¿Por qué estaban haciendo aquello? ¿A dónde lo llevarían?, No quería ir a ningún lugar nuevo, sabía que algún día tendría que superar su condición pero no estaba listo para aquello.