Capitulo 34: Las cosas no son como crees

7 0 0
                                    

— ¿Qué bueno que llegan no está algo tarde?

— Harry... Qué bueno que estés aquí.

— Tú cállate.

— Bueno señores aquí no es momento para pelear.

— Yo iré alistando mis maletas para irme a la otra habitación Tiff. — Dice Scott.

Asiento y me dirijo a abrazar a Harry. El cual me mira con cara de pocos amigos. Pero no me importa me acerco y cuando estoy a punto de abrazarlo el me da un beso. Un beso el cual se lo sigo y escucho a lo lejos la puerta cerrarse duro. Me separo por falta de aire y lo miro sentándome a su lado.

— Amor...

— Princesa. Perdóname.

— Harry... Deberías tan solo hablar con Scott.

— Luego.

— Ese luego no me convence, ve a hablar con el arréglense vuelvan a ser lo que eran.

— Solo porque tú me lo pides lo hare.

— Está bien, y mi madre ¿cómo te recibió?

— Bien se alegró demasiado y Enzo está más que feliz. El que si no me recibió bien fue el idiota de Ethan no entiendo y en cambio Samantha fue más cariñosa y efusiva de lo normal.

— De lo normal a que te refieres.

— Me abrazo por un largo tiempo como si no me hubiera visto en años.

— A esa perra le conviene estar lejos de ti.

— Amor... Calma.

— ¿Calma? Como quieres que me calme. No seas idiota. -Digo levantándome.

— Tiffany si te la pido es para que estés bien de salud.

Me quedo ahí parada como tonta mirando al suelo...

Y el continúa hablándome —Dices que me amas y todo lo demás pero tu corazón pareciera que aun estas con Aaron o alguien más. Te lo voy a decir hoy y no lo repetiré... Estas lista para ser feliz a mi lado o quieres pertenecer a un pasado que ya no existe. Yo a ti te amo con todas mis fuerzas y no sé qué tengo que hacer para que lo entiendas.

—Harry... No tienes que hacer nada porque hace mucho lo entendí. Si quieres te entrego tu regalo de navidad de una vez por todas. Claro que me afecta no de por vida pero si por un momento...

Con eso es suficiente para dejar de estar mirando el suelo y mirarlo a él encararlo. Me deja de mirar y yo entro hacia dónde está mi maleta para sacar la carta que es su regalo de navidad. Encuentro el papel ya algo arrugado. Me acerco y se lo entrego.

Veo como la toma y la abre. Sacando el sobre y después la carta. Veo como la comienza a leer y después deja de leerla para mirarme y sonreír. Sigue leyendo y después de que termina de leer me mira con cara de total asombro.

— Amor... Dime que es una broma...

— No... No es una broma. Esa carta la escribí hace un mes.

— Oh por Dios. Lo que vas a hacer es algo.

— ¿Te gustó?

— Me encantó. Amor... No ves mi cara de felicidad. Estoy en shock. No lo puedo creer. Que hermoso regalo. Te amo.

Oh por Dios lo acaba de decir y esta vez sonó como quería que sonara el si lo siente. El si me ama de verdad.

— Y yo te amo a ti. Ahora que ya sabes que me iré a vivir contigo a Londres podremos comenzar de nuevo con nuestra relación. Podremos dejar de un lado todo este drama.

Amor QuebradizoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora