Tres.
"¿Por qué defiendes a todos?" Preguntó dejándola en su regazo luego de ponerle su sweater para evitar que ella tuviera frío.
Las mejillas de Violet tomaron un ligero color rojo, trató de bajar de las piernas de Harry, pero solo logró que él la acercara más a su cuerpo.
"Creo que es mi sueño" Murmuró bajando la mirada "Que todos sean un poco más agradables entre unos y otros" Jugó con su anillo.
Él se derritió ante las palabras de su pequeña, su chico malo gruñó, tenía miedo de que la pequeña mujer sentada en sus piernas que no pasaba del metro con sesenta le estuviera robando el corazón.
"¿No crees que es demasiado?" Preguntó.
"Lo es, pero por lo menos quiero intentarlo comenzando aquí" Suspiró "Debes creer que estoy loca".
"No" Ella lo miró rápidamente "Creo que es maravilloso que seas así" Le sonrió.
"Gracias Harry" Mordió su labio "¿No crees que deberías bajarme?".
"Me siento cómodo así" Sonrió tomando la mano de Violet y comparándola con la suya.
"Me haces sentir más inferior" Hizo puchero.
"Yo creo que eres hermosa así de pequeña" Murmuró.
"¿Lo c-crees?" Preguntó confundida.
"Lo creo Violet" Se levantó dejándola a un lado "Tengo que irme pequeña" Besó su frente "Mantente alejada de aquella zorra" Rió cuando ella lo miró mal.
"No es una-" Murmuró y negó "Solo me molesta un poco".
"Una zorra" Rió "Aceptalo muñeca, es una zorra y no quiero que te haga daño".
"Harry" La miró "Tu sweater".
"Quédate con el, se te ve bien" Le guiñó el ojo entrando al establecimiento.