Seis.
"Deberías haber salido hace un año" Dijo ella acurrucada a su lado mientras sus ojos estaban puestos en la serie que ambos miraban desde hace dos meses.
"Sí, reprobé dos materias y tuve que repetir el año" Bufó sintiéndose avergonzado, Violet era una cerebrito y se sentía orgulloso de ella por serlo.
"Mira" Chilló apuntando la televisión.
"¿Helado?" Frunció el ceño confundido.
"Si" Suspiró "No tengo helado" Hizo puchero "Se ve rico" Se quejó.
Recordó que cuando estaba en su periodo tenía antojos, besó su frente con delicadeza para seguir mirando la serie.
Harry negó cuando ella se quedó dormida quince minutos después, la miró, era hermosa, rió cuando la escuchó quejarse, rápidamente se levantó del sofá y con cuidado la recostó completamente para correr por las llaves de su moto, su hermana había llegado hace una semana y le había tenido que prestar su auto luego de que su madre lo amenazara con contarle una parte vergonzosa de su vida a su pequeña muñeca.
Cuando llegó soltó todo en la entrada para correr asustado hacia Violet quien lloraba desconsoladamente.
"Violet" Murmuró preocupado "Shh, no llores pequeña" Le levantó y ella lo rodeó con sus piernas "Estoy aquí, estoy aquí muñeca, no llores".
"Pensé" Sollozó "Que me-" Él acarició su espalda cuando la sintió hipar "Habías dejado".
"No, no, no" Se balanceó con ella "Ya estoy aquí pequeña" Sonrió cuando ella se aferró a él como si jamás quisiera dejarlo "Mira, fui por helado para ti" Ella lo miró "De manjar y almendras" Acarició sus mejillas quitando las lágrimas "Nunca te dejaría bolita" Besó su frente.
Sonrió satisfecho cuando la vio comer helado mientras la tenía en sus brazos acostados en el sofá mirando su serie favorita.
Sabía que ella le gustaba.
Y lo asustaba.