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Epílogo.

Harry fue un chico malo en la secundaria hasta sus últimos años, había golpeado a la mayoría de la población masculina y había insultado a la población femenina también en su mayoría, nunca se arrepintió, pero nunca lo disfrutó, quizás se sentía libre después de hacerlo o quizás culpaba a los demás de su soledad.

Había dado su primer golpe a un chico en el primer año de secundaria, solo porque aquel niño le había gritado que era un muchacho pobre que nunca conseguiría ser amado, algo cambió aquel día porque se encargaron de alejarlo de todos y todas. Ser un chico malo fue la única opción que decidió tomar.

Aquel chico malo que deseó cada día ser amado, su madre lo amaba y él lo sabía, pero era enfermera y Harry entendía que tuviera que salvar vidas, fue en penúltimo año que se mudó solo sabiendo que la soledad sería aún peor, entonces llegó Violet.

"¡Bolita!" Gritó desde la habitación.

"¡Mi amor!" Sonrió cuando Violet llegó corriendo a la habitación y se tiró sobre él dejándolos sobre la cama.

Aún seguía siendo pequeña y aún dormía sobre él todas las noches, luego de seis años.

"Te extrañé tanto" Ella se escondió en su cuerpo cuando Harry la rodeó con sus brazos y sus piernas.

"Yo a ti muñeca" Besó su frente "Dame un beso".

Ella lo besó sin perder tiempo, se habían mudado juntos cuando ella comenzó la universidad, aquel día había sido desastroso para Harry, había tenido que luchar con las ganas de matar a todos, Violet había llegado con un vestido casual rojo oscuro ganando miradas, si no fuera porque podía ser expulsado, los hubiera golpeado, hicieron nuevos amigos, tuvieron peleas y celos, pero él nunca dejaría ir a su pequeña Violet por estupideces. La universidad y Violet habían hecho a Harry un poco más maduro, ya no todo se solucionaba a golpes o a gritos, ahora era una conversación amable, ella no se quejaba, parte del Harry de la secundaria aún seguía aquí, su humor, sus piropos, su perversión y su adorable personalidad.

Harry era un hombre ocupado desde que terminó la universidad graduándose como un Kinesiólogo, trabajaba para un equipo de baloncesto en la recuperación de las lesiones de los jugadores, Golden State Warriors lo mantenían ocupado, pero siempre tenía tiempo para Violet quien había logrado conseguir su diploma graduándose en fotografía, había logrado en un año ser fotógrafa de un cantante y trabajar para Calvin Klein, ahora trabajaba para Chanel y viven bien con eso.

"¿Ganaron el juego?" Ella preguntó acariciando su pecho mientras seguían abrazados.

"Claro que sí bebita, es más, los chicos te mandaron un poco de torta por el cumpleaños del entrenador" Le comentó "¿Cómo te fue hoy?" Preguntó acariciando su cabello disfrutando del aroma de este.

"Bien, logré conversar con Michael y pues tenemos una sesión mañana temprano con las modelos que elegimos con Karl" Asintió.

Harry bufó al recordar que Michael había estado invitando a salir a Violet, ella solo lo rechazaba porque estaba llena de trabajo y porque odiaba llegar tarde a casa.

"Michael aún sigue-".

"Me invitó a cenar con su familia mañana" Le comentó.

"¿Sabe que tienes novio?" Gruñó haciendo reír a Violet.

"Todos lo saben" Besó su mentón "Es solo una cena de amigos".

"¿Vas a ir?" Preguntó ofendido.

"Voy a ir porque va a seguir insistiendo" Hizo puchero cuando Harry dejó de abrazarla "Mi amor, solo es una cena sin importancia, Michael es un buen chico y ha sido muy amable conmigo desde que entré, solo quiero agradecer y dejar de ser una mala amiga cada vez que rechacé sus invitaciones".

"Pues ve, saldré con Ayda a comer".

"¿De verdad estás haciendo esto?" Lo miró frunciendo el ceño.

"No, mierda no, pero no quiero que salgas con él" Hizo una mueca que su novia consideró adorable "Han pasado dos semanas de la última vez que te tuve toda una noche para mi solo, te extraño demasiado" Se quejó "He estado estresado toda la semana en el trabajo, han pasado muchos años y aún me estreso cuando no estás cerca" Ella acarició sus mejillas "Quería que mañana saliéramos, te iba a llevar por una pizza de esas que te gustan, luego tenía entradas para una película antigua" Violet sonrió tierna "Y quería hacer el amor, pero ni siquiera vas a estar conmigo" Se volvió a quejar.

"Harry" Rió acariciando su mentón "Te amo".

Él sonrió para besarla con suavidad.

"Te amo más" Susurró sobre sus labios para seguir saboreándola.

"¿A qué hora salimos?" Preguntó dejando pequeños besos sobre sus labios.

Él sonrió.

"A las seis bolita" Murmuró para dejarla bajo su cuerpo.

"Dijiste que haríamos esto mañana" Rió acercándolo a ella.

"Sí, pero hoy quiero hacerte un bebé" Besó su cuello mientras sus manos acariciaban a suave piel de sus piernas desnudas.

"No me voy a oponer" Él rió.

Él estaba en su interior empujando con rudeza, tomaba sus caderas con fuerza acercándola aún más a él. Violet sollozaba de placer, le encantaba su novio, lo adoraba, lo quería siempre con ella, dio la última estocada para quedarse quieto sobre ella, ambos tratando de recuperar la respiración abrazados.

"Bolita" Murmuró buscando su mirada.

"Mhm" Peinó el cabello de Harry que caía por su frente "Te ves sexy" Dijo haciéndolo reír.

"No me gusta tu apellido" Murmuró rozando sus labios.

"¿Qué tiene de malo?" Frunció el ceño.

"¿Parker?" Negó "Es demasiado común".

"No todos pueden ser Styles" Ella dijo divertida.

Harry la miró con una sonrisa tímida.

"Espera" Él mordió su labio "Estas-".

"¿Me dejarías ser tu esposo?" Preguntó acariciando su mejilla "¿Te gustaría llevar mi apellido?".

Ella lo abrazó fuerte mientras asentía con rapidez.

"Oh mi bolita" Se sentó en la cama con ella en su regazo "No llores".

"No me pidas eso" Pidió besando su rostro.

"¿Vas a ser mi esposa?" Le preguntó sonriente mientras tomaba el anillo desde su mesa de noche y lo ponía en su dedo.

"Toda mi vida" Lo besó.

"¿Vamos a tener bebés?".

"Te lo aseguro" Rió alegre "¿Quieres que yo sea tu esposa?".

"Es lo que más deseo ahora" La abrazó, no quería llorar, no quería que su prometida lo viera vulnerable.

"Mi amor" Sonrió "Te conozco demasiado".

Él lloró en su pecho.

"Llorar es masculino" Murmuró acariciando su cabello.

Él sonrió, ella era tan linda.

"Te malditamente amo" La besó "Vamos niña amabilidad, dile una mala palabra a tu chico malo".

Ella rió.

"Te malditamente amo Harry malo Styles".

"Después de todo, ser un chico malo me trajo buenas cosas" Le guiñó el ojo.

Ambos se besaron, los chicos malos aprenden a ser amables y también merecen ser amados.

Kindness |h.s|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora