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Las fiestas nunca han sido del agrado de Tzuyu.
Había una razón muy clara y era que en todas y cada una a las que asistía con sus amigas tenía que ver a Sana y Dahyun más... cariñosas de lo normal.
La menor desconocía el tipo de relación que tenían, no es como si en la vida diurna no fueran cariñosas una con la otra pero nunca se habían propasado con las muestras de afectos, de todas formas también le molestaban aquellas.
Aunque le disgustaba de sobre manera que necesitarán de una reunión con un poco de alcohol para romper la última barrera que había entre ellas y comerse la una a la otra en cualquier rincón del lugar, más de lo que Tzuyu podría soportar, se alegraba de que no fuera así en la cotidianeidad.
Sin embargo tenía un pequeño brillo de esperanza muy dentro suyo. Era cuestión de razonamiento, todo el mundo sabía que ambas se traían ganas y a nadie le parecía extraño o incorrecto, ¿Por que no salían abiertamente y dejaban de pretender que nada pasaba entre ellas? A Tzuyu le gustaba pensar que sólo se querían para pasar el rato y no había nada de amor entre ellas, mas que el de la amistad.
Lo cierto era que Nayeon no era la única que estaba enamorada de una de sus amigas y lo mantenía en secreto.
A Tzuyu le costaba demasiado aceptar que le atraía Sana. Había dejado atrás la teoría de que sólo la admiraba por ser mayor y bonita, o la teoría de que sólo le gustaba un poco porque la japonesa era cariñosa y atenta con ella, de todas formas era cariñosa y atenta con todas.
Los sentimientos de la taiwandesa eran más puros que la admiración, el respeto o incluso la amistad. Nada de eso, lo que sentía cada vez que Sana la abrazaba o compartia tiempo con ella era lo más parecido a tener mariposas en el estómago que había experimentado en toda su vida.
Con la idea de que con Dahyun sólo eran amigas con derechos o algo por el estilo, decidió ponerle fin a eso y arriesgarse por lo que hacía latir su corazón.
Era de esperar que la japonesa se apartara con Dahyun en cuanto tuviera oportunidad, Tzuyu estaba a punto de ir tras ellas hasta que Jeongyeon le pidio que la acompañara al baño.
No pudo decir que no pero sin embargo no duró demasiado acompañando a la rubia, cargaba demasiada ansiedad como para quedarse allí esperando así que se disculpó con su amiga diciendo que tenía algo importante que hacer.
No fue una mentira.
Se abrió pasó entre los invitados hasta la pista de baile esperando no encontrarlas a mitad de un beso o algo asi pero más desafortunadamente no las encontró alli en absoluto.
Trato de no perder la cabeza, todavia, y recorrer la fiesta lo más calmada que podía esperando dar con ellas, aunque prefería dar sólo con Sana.
