quinto capítulo.

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cuervos.

Todos los osados tienen algún miedo,la mayoría se los tatúan.

Eso quiero,un tatuaje.. tal vez de un cuervo .

Se quien los hace,pasando las escaleras de la central tecnológica hay un mostrador y un par de sillas.seria interesante hacerme uno,pero no con cristina y mi padre vigilandome las 24 horas.

Sigo viendo a los iniciados,creyendo que quizá,algún día,de alguna forma,seré como ellos.

Pero al volver a la realidad recuerdo que mi padre quería cenar conmigo.

Me acerco a la mesa,no tenia hambre.

-¿que comeremos?-le dije

-te he traído algo especial de postre-dijo mi padre -pastel de osadía.

-¿pastel de osadía?

-si,es extremadamente rico en chocolate y azúcar.

-y,¿por que su nombre?

-que los osados no sean dulces no significa que no nos gusten las cosas dulces,nos fascinan.

Su comentario me convenció y al terminar de comer arroz de la cafetería de osadía tome rápidamente una porción de pastel.

Era muy dulce,¿quien lo hubiera dicho?,las personas mas duras saben como comer las cosas mas dulces.

Lo que recuerdo cuando me despierto es que luego de 4 porciones me fui a dormir.

Pero hoy a la tarde cosas raras pasaron,¿recuerdas a Ciro? El chico de mi clase,el osado.bueno,su madre trabaja aquí y ayer lo vi.

Nos encontramos cuando "espiábamos" a los iniciados.no creí que tuviésemos aquel sueño en común .nos quedamos hablando sobre como nos gustaba osadía,nuestras historias de vida y anécdotas de este lugar.

Al salir del entrenamiento los iniciados salieron hacia el comedor,entonces nosotros decidimos apurarnos y fingir ser jóvenes que practican para ser verdaderos osados.

Yo tome los cuchillos,pero el las armas.

-¿sabes disparar un arma?-me pregunto Ciro mirando fijamente a un punto en la pared y disparando.

-no,si mi padre ni siquiera sabe de mi presencia aquí me imagino que no le gustaría saber que manejo armas-le dije en modo burlón.

-¿te enseño?

-bien.

El se paro detrás de mi,puso en mis manos el arma y me hizo una seña para que mire a un punto.

-bien,escúchame.-dijo el

-bien.

-mantén tu respiración tranquila,no sierres los ojos y no te distraigas.

-¿algo mas que deba saber?

-si,ponte menos perfume.

Nos reímos,hasta que se puso incomodo.

-deja de oler mi perfume

-lo siento,solo recuerda lo que te dije.

Me cubrió los odios y note que era hora de disparar.

y ¡pum!

El ruido fue muy fuerte,pero gracias al cielo el tapo mis odios.

Dispare un poco a la derecha del blanco pero note en el una buena calificación para el disparo.

-bien,has entendido.

-jaja,¡no eres mal maestro!,¿quien te enseño a ti?

-mi padre.

Hicimos otro silencio incomodo,su padre había muerto hace ya dos años,no supe en ese momento como reaccionaria.

-bien,debo irme,nos vemos mel.

-gracias por llamarme mel y no molestia.

-gracias por no ser una molestia-dijo al irse.

Entonces me di cuenta de que se hacia tarde,cristina sospechará muy rápido sobre en donde estoy,pero solo se que valió la pena.

En el camino a mi cuarto recordé todo lo sucedido sonriendo,creo que si un osado me ve me vería raro,bueno ,eso creo.nunca he visto a un osado sonreír .que no sean mi padre o cristina.

Llego a mi cuarto y cierro mi puerta.

-¿no es algo tarde .....,mel?

facción antes que identidad.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora