Discusión

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Me quedo mirando mi celular por un instante sorprendida de que Trevor me había colgado la llamada de esa manera

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Me quedo mirando mi celular por un instante sorprendida de que Trevor me había colgado la llamada de esa manera. Mierda... este asunto de Calvin estaba empeorando las cosas y los celos de Trevor estaban aumentando cada vez más.

Calvin estaba como si no hubiese tomado ninguna llamada hablándome sobre un partido de baloncesto que había visto el día de ayer, pero sus anécdotas no son como las que Trevor cuenta, lo hace como si quisiera verse como Trevor, algo que me enfurecía verdaderamente. ¿En serio aguantaré durar todos estos meses con Calvin?

Me resultaba un poco fastidioso de que intentara verse como Trevor. Él nunca me había estado hablando de algún deporte y ahora lo hace como si fuera su fascinación, pero sé muy bien que no es así. A Calvin le gusta más el entretenimiento y lo sé porque me lo había dicho la primera vez que nos conocimos.

No podía dejar de pensar en Trevor, algo en mí me decía que tenía que hablar con él. Por lo que me disculpo con Calvin y me levanto para ir al baño de damas del hotel. Al entrar en él me miro al espejo y siento un pequeño dolor en el pecho, tomo mi celular y marco el número de Trevor, espero que me conteste y entonces él cuelga la llamada.

—Maldita sea. —oprimo la opción de enviarle un mensaje, por favor, deja esos celos.

Oye, es de muy mal gusto que me cortes la llamada. 13:11✓✓

No, es de muy mal gusto que quieras acabar con nuestra conversación para poder comer con tu compañerito. 13:11

Amor, no quiero que estemos mal, por favor... contesta la llamada. 13:12✓✓

Y de inmediato recibo su llamada, doy un suspiro y contesto llevando mi celular a mi oreja derecha con esperanza de no discutir con él.

—Lamento haber...

No es posible que estés todo el tiempo con él. —me interrumpe al instante antes de que pudiera disculparme— Sé que son compañeros, pero sabes muy bien que sus intenciones contigo no son de trabajo. Hayley, eres inteligente, deberías saberlo más que yo. Ayer no habíamos hablado y...

—Claro que no hablamos, te fuiste a beber y estabas ebrio ¿pretendías que así te llamara?

—¿Y qué me dices de ti? Llegas para cenar pizza en "tu habitación" con ese tipo—me reclama evidentemente molesto.

—Por lo menos tuve la decencia de decírtelo porque pensaba que confiabas en mí.

Mierda, confió en ti, confió en nosotros. Pero ese tipo siempre te está buscando y lo que me molesta es que sabes sus intenciones y no haces nada para detenerlo. ¿Por qué aceptas todo lo que te ofrece? Dime... dame una explicación lógica de que por qué tienes que aceptarle todo.

—Trevor, tienes que entender que hacerlo mi enemigo no me ayudará en nada... estaré lastimosamente con él durante estos meses por trabajo. No puedo...

De repente llegaste a mí © EN EDICIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora