(Narra Aitana):
Hoy me levanté temprano y decidí quedar con Amaia para tomar un café.
-Joder Amaia estoy súper preocupada por Luis
-No te preocupes Aitana ya verás como no le pasa nada, ya después vamos a la policía y verás como aparece
-Ojalá. ¿Bueno y tú que tal con Alfred?
-Pues bien. Últimamente muy ajetreados.
-Ya normal
Después de desayunar fuimos a la policía poner la denuncia y nos dijeron que con cualquier cosa nos avisarían. Después recibí un mensaje que no me esperaba... era de Vicente, quería que nos viésemos en Madrid ya que él estaba aquí unos días, yo accedí y quedamos a las 5 en una cafetería. A las 5 me presente allí y allí estaba él. Lo saludé y nos sentamos en la mesa a merendar
-¿Y bueno que, ha aparecido el Ceporro ese?
-Vicente, no lo llames así. Y no, no ha aparecido
-Mejor, así te deja ya en paz
-Vicente para ya por favor, esto está siendo muy duro para mí
-Bueno ahora vengo, voy al baño
-Ok
No esperaba ver a Vicente así, estaba teniendo un comportamiento que nunca había tenido. Su móvil empezó a sonar y abrí su mochila para ver quien era. Vi un número privado y decidí cogerlo
-Vicente deberías venir, Cepeda se está empezando a poner nervioso y no aguanta más a estar atado
Y colgó. No me pude creer que Vicente le hubiese hecho algo a Luis. Me fijé en su mochila y no pude creer lo que vi... en su mochila estaba la medalla de Luis. Me fui del bar sin despedirme de Vicente y me fui a casa de Roí a dormir pero no le dije nada de lo de Vicente, ya se lo diré mañana aunque mi cabeza no podía pensar en otra cosa en toda la noche
