Capítulo 2: misery. Parte 2/2.

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Capítulo 2.

Los minutos pasan tan lentos que a la hora del recreo, me siento cinco años más vieja. Las clases hoy han sido realmente aburridas, cosa, en verdad, bastante normal, pero agobiante aún así.

No me apetece para nada sentarme con Harry y Zac, quienes hablan animadamente sobre el último nivel de un videojuego, así que me dirijo a tumbarme en el césped, a la sombra de un árbol, con un poco de música y comiendo un par de galletas de chocolate. Aún quedan unas horas de clase y tengo que reponer fuerzas.

El tal Michael no ha vuelto a dirigirme la palabra, tampoco es que lo haya estado esperando de todos modos. Apenas ha hablado con nadie que no sean las rubias esas de bote, ni ha participado en clase, ni siquiera cuando le han pedido que se presente, simplemente se ha levantado tan tranquilo, ha sonreído y ha respondido un fuerte y claro "Soy Michael. Y eso es todo lo que necesitáis saber.", por lo que eso es lo único que sé de él. Supongo que hacerse el misterioso funcionará con las demás chicas, pero no conmigo, su actitud me ha dado realmente náuseas.

Wake me up de Ed Sheeran resuena en las paredes de mi cabeza y empiezo a tararearla suavemente. Es una de mis canciones favoritas.

...Cause maybe you're loveable,

and maybe you're my snowflake,

and your eyes turn from green to grey...

From green to grey.

Green. Grey.

Los ojos del "rarito" son una mezcla entre verde y gris, y me sorprendo a mí misma pensando en él al escuchar esa parte de la canción. Es verdad que sus ojos son bonitos, pero no deberían siquiera pasárseme por la cabeza y menos cuándo oigo hablar de amor. ¿No puedo ni escuchar una canción sin que me moleste? Ugh.

Me retiro los auriculares y los guardo en el bolsillo izquierdo de mi pantalón, ahora lo único que escucho es algún que otro sonido que hacen los pájaros, y de fondo, voces mezcladas hablando sobre el verano, la vida, el amor, basicamente de todo. Nadie es tan patético como yo, que me siento sola debajo de un par de ramas y ya me encuentro bien. Los demás ríen a carcajadas de cualquier cosa. Están los típicos grupos cliché que todo colegio tiene, los populares a un lado, los nerds a otro, deportistas en la cancha haciéndose los machitos... Y yo estoy aquí.

Cuando estoy a punto de sacar el móvil y comprobar la hora, el sonido que anuncia la vuelta a clases me recuerda que mi paz ha terminado. Me levanto lentamente, sacudiéndo mi ropa, asegurándome de no tener hierba pegada en ningún sitio, y corro hacia mi siguiente clase. Francés.

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Al llegar a casa, me siento como una reina. Después de toda la mañana fuera necesitaba el cariño de mi hogar, tirarme en el sofá a comer pizza y descansar viendo algún programa absurdo que echen por la televisión. Al final me acabo durmiendo, hasta que el sonido de llamada de mi móvil empieza a molestar.

-¿Quién? -Respondo sin mirar el identificador de llamadas, con la voz ronca por el sueño y los ojos entrecerrados.

-¿Sam? -Se escucha una risa. Helen. -¿Estabas dormida?

-Ugh, cállate. ¿Qué quieres? Tengo sueño.

-¡Tía! -Grita tanto que tengo que apartar ligeramente el aparato de mi oido. -¡He estado hablando con él! Se llama Calum. ¿Sabes que... -Desconecto cuando me empieza a contar toda la historia, todavía estoy dormida, me pide demasiado. Lo último que alcanzo a escuchar es que han quedado mañana para dar un paseo.

-Me alegro mucho, idiota. En serio. -De verdad me alegro. -Te llamo más tarde, ¿vale? Necesito terminar mi siesta. Es cuestión de vida o muerte.

-Exagerada... ¡Hasta luego!

Pero para cuando voy a despedirme, ella ya ha colgado y lo único que queda son unos pitidos al otro lado de la línea telefónica.

Me vuelvo a dormir.

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Podéis matarme, os dejo hacerlo. He tardado demasiado en subir y lo siento, en serio. Además esto me ha quedado muy corto y aburrido.

De todos modos, si esto llega a +7 VOTOS, subiré algo más largo el domingo. Prometido.

PD: comentad, babes :) xx

PD2: si por casualidad hay por aquí escondida alguna larry shipper, podéis pasaros por mi perfil y leer el one shot que escribí el otro día, os lo agradecería mucho.

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