Jardín de Rosas Negras

°Capitulo 9°

-¿Podemos hablar de eso en otro lugar...?- Namjoon miraba a Jungkook con un sonrojo bastante notorio, esto solo logro que el de ojos oscuros sospechara más.

-Ven conmigo- 

Jungkook caminaba apurado por los pasillos tomando a Namjoon de la mano asegurando que no se le escapara. Cruzaron varios pasillos, evadiendo a los estudiante que bagaban por estos, pasando por el frente del salón del consejo. Pasaron de largo y salieron de la secundaria.

-Jungkook...¿Adónde vamos?- 

-Falta poco- Siguieron caminando pasando por las canchas de baloncesto, hasta que llegaron a una clase de cobertizo, a unos pasos del jardín del cual Namjoon debe hacerse cargo. 

Jungkook saco una pequeña llave de su bolsillo, llamando la atención de Namjoon. Abrió las puertas del cobertizo entrando con con el moreno, cerrando con llave, guardando el pequeño objeto en su bolsillo.

Namjoon paseo la mirada por toda la habitación. Se veía más espaciosa de lo que pensaba, olía un poco a humedad pero no le era extraño, no entraba mucha luz por lo que podía notar. Habían varias herramientas de jardinería  colgando en las paredes, macetas y una que otra flor marchita en el suelo, todo cubierto por una fina capa de polvo. La habitación estaba hundida en un aura de melancolía.

-Bien... Ya estamos solos, ahora quiero que me cuentes lo que paso-Jungkook se apoyo en una de las paredes mientras veía a Namjoon. Este solo lo miraba dudoso. 

¿¿¿Que le iba a decir??? No le quería mentir, pero tampoco es que pudiera decirle tan fácilmente que su tutor casi lo viola con su celular. Y que pasaría con la carrera de Jae Bum? Si se lo contaba a Jungkook, lo más probable es que fuera a decirle al director. Un escándalo como ese acabaría con la carrera de Bum, era lo peor que le podría pasar. Y eso no era todo, si la secundaria se llegara a enterar de eso su vida estaba acabada, condenado a las crueles palabras de sus compañeros, ahora con más material para hacerle sentir como basura. 

Namjoon estaba empezando a temblar por los nervios, no había solución más que mentirle, cosa que no haría. Jungkook se dio cuenta del temblor de Namjoon, inmediatamente se acerco a este tomándolo de las manos.

-Namjoon cálmate, primero cuéntame lo que paso-

-Prométeme que no se lo dirás a nadie-

-Eh?-

-Promete lo si?- Jungkook asintió un poco dudoso. Namjoon respiro hondo, antes de empezar a hablar.

Todo se lo contó sin mirarlo a los ojos, con la vista clavada al piso como si fuera lo más interesante del  mundo. Al culminar solo espero respuesta de su acompañante, sin moverse ni un centímetro. Todo estaba en silencio, un silencio aplastante para Namjoon.

Jungkook seguía procesando lo que acababa de escuchar. ¿¿¡Como es que alguien se había atrevido a hacer tal cosa!?? Al comprender mejor lo que le había dicho el moreno, sintió como la furia lo invadía. ¿Ese profesor que se cree? Él fue quien lo había recibido cuando llego de nuevo ingreso, no le presto mucha atención, pero siempre tuvo un mal presentimiento. Pero definitivamente nunca se imagino algo como esto. Namjoon seguía al frente de Jungkook esperando que rompiera el silencio, mientras que este solo pensaba en como afrontar la noticia. 

Namjoon seguía allí, escuchando su desbocado corazón que se aceleraba con cada segundo que pasaba. Hasta que por fin Jungkook dio señales de vida, fue acercándose al moreno con pasos pesados.

-¿J-Jungkook...?- El nombrado siguió acercándose a Namjoon hasta acorralarlo contra la pared. Poco a poco fue acercando sus rostros. Sus respiraciones se mezclaban, escasos centímetros separaban sus labios. Namjoon cerro sus ojos con fuerza, tensándose un poco. Cuando Jungkook seso su acercamiento.