No tengas miedo ➸Stanley Uris.

"Capítulo Once"

Johnson.

Lo miré con asombro, estaba totalmente segura que era el, de un momento al otro habia olvidado que estaba en una cada abandonada como a la seis de la mañana. Stanley, ese era el y quería saberlo, que me mo confirmara.

—¿Stanley?—Repetí, mis ojos se estaban cristalizando. El asintió minutos después no muy seguro, intentaba recordar seguro quien era yo. Estaba llorando, de mis ojos salían tantas lagrimas quw ahora abría un nuevo mar "Mar Johnson". Los había olvidado, el club de los perdedores, a Stanley, esos momentos que vivi en Derry, Maine. Lo había olvidado y ahora los recuerdos chocaban conmigo, me sentía horriblemente mal.

Rápidamente le tiro el libro y me doy vuelva bajando las escaleras hasta la puerta, ¿que diablos hacia?, nadie me estaba persiguendo, ni sabía que hacia. Salí de la casa y corrí a dirección contraría al hotel, o sea seguía el caminó recto. En unos minutos paso a camara lenta, estaba en el duro cemento junto a alguien más. Miré a ese alguien quien, en ese momeno mis ojos se abrieron enormemente, ¿Era Bill?, la pubertad si estaba de su lado.

—¿Bill?—Digo, era lo único que salió de mi boca.  

—¿_____?, er-eres tu...—Dijo mirandome con la misma reacción, me había reconocido.  

—Si, soy yo, es muy agradable verte—Le sonreí.

—Crei que no t-te volveria a v-ver—Dijo con tono algi triste, si que lo amaba.

Por alguna razón no dije nada, noté que mis lágrimas se incrementaban, soy una ridícula llorona.

—¿Por que ll-lloras?—Preguntó preocupado.  

—Los recuerdos...No importa—Conteste rápidamente para abrazarlo.

—¿Quieres ponerte al co-corriente?—Preguntó y Asenti, alo que nos levantamos, yo solo quite el polvo de mi ropa sacuendolo.

Empezamos a caminar, mientras hablábamos el me contó que pasaba con su vida y que Beverly se habia ido, al parecer le gusta, al igual que Ben, la verdad era muy obvio y hasta me lo confesó. Yo empecé a hablarle de cómo era california, su gente, mi estadía y acontecimientos. Al terminar de hablar de el colegio, de Mara y otras cosas graciosas pasadas en el colegio, faltaba hablarle de Carter.  

—Por tu cara creo que algo m-me ocultas—Dijo Bill a lo que yo lo miré, era muy listó.

—Conseguí un amigo, su nombre es Carter—Empecé.

—Creo que se a donde va es-esto—Comento y yo solo Asenti.

—Mara me inscribo a un colegio, al llagar era nueva y no sabía nada, estaba muy desorientada. Al llegar al aula me senté en un banco vacío, eran de dos. Miré a un chico quien se encontraba a unos bancos de mí, quien estaba leyendo un libro, parecía esconderse de la gente. Ese dia nos tocó hacer un trabajo juntos, empecemos a hablar y me cayó bien, ers muy divertido al ya tenernos confianza, siempre sacaba temas y me hacía reír, nos convertimos en grandes amigos estos cuatro años. Hace poco hubo un baile y fuimos juntos, la cosa es que el se confesó, gustaba de mí—.

—¿Que le dijiste?—.

—Me fui corriendo—Dije y el rió, yo intentaba mantenerme sería pero me uní a su risa.

—Pobre Carter, ¿pero le pudiste decir al-algo?—Preguntó y negué.

—Vine aquí, llamó pero le colgué inventando que no había señal—.

—¿Sabes que no puedes ocultarte para siempre?—Preguntó y Asenti.

—Bill, eso lo se pero necesito pensar, venir aquí Creo que fue lo mejor—.

—Pero debes pensarlo, no ignorado o le que le dirás, de-debes pensarlo bien—.

—Lo sé....que complicado—.

—No te compliques, _____—.

—¿Bill?—Pregunte mientras me tapaba la cara con mis manos.

—¿Sí?—.

—Vi a Stanley—Dije y pensé en lo sucedido, no otra vez.