Helpless

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Comentario del autor: Ahora es cuando me pregunto, ¿que se van a esperar con el nombre del capítulo? ¿Acaso pensaran que tendré clemencia?

Pues vamos a descubrirlo

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         Martha llegó al hospital Schuyler, con el corazón en la mano y la mente en la otra, rogando a cualquier dios que John estuviera vivo; se veía sudorosa, con ojos rojos de tanto llorar, con miedo... Encontró rápidamente la recepción y preguntó acerca del chico de pecas que tuvo el accidente de auto; tardaron varios segundo, que para la rubia eran eternos, en darle una respuesta; de allí la enferma lo guió para la sala de espera, debía decirle lo que pasaba con él antes de verlo. 

-Por favor, solo diganme que está vivo-le rogó Martha a la enfermera a aquella sala y sentarse-necesito verlo-

-Está estable-le dijo de forma neutral la enfermera-pero, antes de llevarte con él, debo decirte su situación.

         Y así Martha se quedó allí, escuchando, mientras la enfermera le relataba todo lo que pasa con John: sus fracturas de brazos, costillas y piernas; los vidrios; rotura en la médula y la reciente operación. Todo en ella se rompía lentamente, y con dolor, con cada palabra, cada lágrima, cada pausa que daba la enfermera para poder contarle de cómo su mejor amigo sufría; se sentía tan impotente, molesta, enojada, triste, con culpa; culpa de haberse enojado con él, en vez de haber si estaba bien; culpa, de no pensar un segundo que tal vez lo había pasado algo; John jamás la hubiera abandonado, ¿por que no penso en algo tan racional que tuvo un accidente? ¿por que no había llamado a Lafayette ayer en vez de armar un plan para que se disculpara? 

        Debo dejar eso atrás, ahora necesitaba verlo; y adjuntando eso, tiene un nuevo plan: irá a la habitacion de John, se va a disculpar, le pedirá explicacion, ambos tendran un momento muy meloso, va a abrazarlo, a golpearlo por haberla asustado así, y se reirán de cosas sin sentido, como siempre; juntos van a superar esto, pero mas que nada, necesitaba verlo. Después de unos minutos de preparación, la enfermera guió a la rubia a cuidados intensivos; allí pudo ver a John.

-Oh dios mío-dijo ella llevándose la mano a la boca y con la voz quebrada, en el segundo que llegaron a su habitación.

       Allí su alma terminó de romperse, término de fragmentarse en miles de pedazo al ver a John conectado a miles de máquinas, con una parte de su cabeza rapada, con sus hermosos ojos verdes cerrados como si estuviera durmiendo; ese no podía ser su John, no quería creerlo; está tan débil, indefenso, tan frágil que parece que sí se le quitaba los ojos de encima por un momento, moriría. Camino despacio hacia él, con tanto temor en su mirar, como si viera al mismísimo diablo; pudo ver mejor esos pequeños cortes en todo su cuerpo, morados en su blanca piel, gran parte de su cuerpo vendado, un tubo que le salía por la boca, algunas vías donde le daban medicamentos, sus ojos cerrados. A este punto, solo podía llorar a mares.

        La enfermera se retiró, dejándolos a ellos dos solo; Martha estaba en un shock, que por un momento creyó que se desmayaría. Cuando pudo volver en si, busco una silla y se sentó al lado derecho de John; no tenía alguna palabra, no tenía alguna otro pensamiento, tal vez sintió como todo en su estómago le daba más vueltas que un carrusel, pero no le importo. Si esto se trataba de un mal sueño, solo quería despertar, solo quería despertar ahora para poder ir a la cafetería y golpear a John, abrazarlo, golpearlo otra vez...pero era la realidad. 

        El incesante sonido del Bip del monitor cardiaco, que mostraba que el estaban aun en este mundo, es lo único que suena en aquella habitación, el constante sonido es lo único que le daba a Martha esperanzas; quién sabe por cuánto tiempo ella se le había quedado viendo, lo observaba como si fuera la última vez, con todo ese moquero en su nariz y sus ojos rojos; no le importo las múltiples llamadas del Lafayette en su celular, que el mismo vibraba sin cesar; o sus ganas de ir al baño; tenía miedo, pavor de que si se le despegaba los ojos por un segundo lo perdería.

Voy a remediarloWhere stories live. Discover now