— Jiminie, ¿qué estás haciendo? — casi pude oír el corazón de Taehyung romperse —. ¿Qué está pasando? — había un tono de confusión y terror en su voz. Los ojos bien abiertos fijos en el bulto y su cuerpo temblando.
— Tu amigo no está aquí — remarcó Jungkook —. ¡¿Quieres decirnos de qué se trata esto?!
Jimin estaba ahí, frente a nosotros. Los brazos y las piernas separadas, sujetando fuertemente la puerta para que no pudiéramos escapar. Poco a poco, abrió la boca y un par de colmillos le empezaron a crecer. Sus pupilas se dilataron, pero su mirada seguía siendo la misma: la de un perrito inocente y dulce.
Con una mezcla de preocupación y satisfacción, me volteé hacia mis amigos para decirles que había estado en lo correcto todo este tiempo, que debieron haberme escuchado y tal vez no estaríamos aquí. La desesperación y el placer de tener la razón me llenaban. Justo antes de gritar con orgullo un "se los dije", mi cuerpo se paralizó.
Al fondo del salón, saliendo de una puerta que no habíamos visto, estaba aquel hombre misterioso que sopló mi velita hace dos noches. Alto, ancho de hombros, rostro ridículamente perfecto y vestido con un traje elegantísimo, sin una sola arruga o hilo suelto. Las sensaciones de aquel incidente volvieron a mí una a una: el frío mortal, el miedo que me ahogaba, la parálisis fastidiosa.
Lentamente, se acercó a nosotros con pasos ligeros y graciosos, con una postura y una caminata dignas de un verdadero rey.
— ¡Bienvenidos! — nos dijo, con los brazos abiertos, haciendo que el resto voltearan en su dirección —. Bienvenidos, tú, Yoongi y sus vasallos.
— ¿A quién le dices vasallo? — se quejó Jungkook, causando el disgusto de la eminencia frente a nosotros. Hoseok lo calló con un "shhh", llevándose el dedo a los labios.
— Jiminie — lo llamó Taehyung, inocentemente —. Por favor dinos ¿qué es esto?
— ¿No es obvio? — inclinó la cabeza a la izquierda, gesto ridículo de su falsa dulzura —. ¡Es una fiesta! Y ustedes son los invitados de honor — esto último lo dijo viendo fijamente a Jungkook, lamiéndose los colmillos.
— ¿Fiesta de qué exactamente? — preguntó Hoseok, con un terror ahogado en la voz.
— Fiesta de compromiso, por supuesto.
Todos volteamos a verlo, sorprendidos.
— ¿Compromiso de quién? — dijo Taehyung, decepcionado —. No será tuyo y...
El pobre seguía teniendo esperanzas con el bulto, trágico en verdad.
— ¡Por supuesto que no! — gritó el vampiro elegante, acercándose más, atrayendo nuevamente las miradas —. Él se refiere al mío con Yoongi.
¡¿QUÉ?!
— ¡¿QUÉ?! — gritaron Taehyung y Hoseok.
— ¡FELICIDADES, HYUNG! — gritó Jungkook.
— ¡No me voy a comprometer, baboso! — le contesté, confundido y enojado.
Jimin hizo un gesto desorientado y luego volteó a ver a su amigo vampiro.
— Dice que no se va a casar contigo, Jin-hyung — así que el amigo Jin y el vampiro guapo son el mismo. Me siento torpe por no haberme dado cuenta antes —. Estoy confundido.
¿Qué esperaban que dijera? ¡Soy yo el que estoy confundido!
— Francamente, yo también — dijo Jin, llevando su mano a su barbilla. Se dirigió a mí ahora —. ¿Por qué dirías eso, mi ángel?
¡¿"Mi ángel"?! Hace un buen rato que no logro entender una sola palabra de lo que estos engendros dicen. Por los rostros de los demás, puedo decir que ellos tampoco.
— Voy a necesitar explicaciones — dije entonces.
— Puedo darte lo que me pidas — respondió Jin, con voz bastante encantadora, para ser honesto —. Verás. Cuando invadiste nuestro hogar con dos de tus vasallos, no pude evitar notar tu destacada belleza y caí inmediatamente enamorado de ti — ¿no escucha lo que está diciendo? —. Por lo que te pedí esa misma noche que fueras mío, ¿ya lo olvidaste, amor?
— Uno: no sabía que eso era una propuesta de matrimonio — no lo sabía —. Dos: no di una respuesta — sí lo hice, una patada en lo que creo que fue la entrepierna —. Y tres: habría dicho que no — obviamente.
Jin me vió con sus bonitos ojos negros e inocentes.
— ¿Por qué dirías que no? Soy mucho más guapo que el promedio — en eso tiene razón, debo admitirlo —; soy rico, no te faltará nada si estás conmigo; y mis sentimientos por ti son verdaderos, jamás me atrevería a lastimarte — el hecho de que esté aquí como rehén no me tiene muy convencido.
— Tiene un punto — intervino Jungkook.
— ¿Te callas? — lo regañó Hoseok.
— ¡Porque no! — le respondí —. Uno no sólo dice que sí a alguien que ni siquiera conoce. Se supone que te casas con alguien a quien amas, ¿no? — jamás en mi vida creí que algo tan idealista y cursi saldría de mi boca.
— Eso se resuelve muy fácil — se acercó hasta que quedamos a una distancia peligrosa el uno del otro. Con una mano agarró mi cintura y con la otra mano sostuvo la mía, la acercó a su rostro —. Sólo tienes que enamorarte de mí — y la besó.
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(•w•)
(•w•)/ <hola!
Ufff capítulo largo. Yoongi y Jin por fin se reunieron de nuevo y están... COMPROMETIDOS?!
Disfruten el fanservice ;) Este es uno de mis capítulos favoritos hasta ahora, espero que te guste también.
PD: a veces me refiero al lector como plural y a veces en singular :v what's consistency anyway, right?
Fotito del día de hoy:
No es lindo?
Gracias por leer :)
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Bangpire || YoonJin / NamSeok / Vmin
FanfictionBangtan + Vampiros = Bangpire "- Y es entonces que me animo a preguntarle: ¿Sería usted mío? - ¡Aléjate de mí, maldito demonio!" Cuatro inocentes y lindos mortales en un campamento: la perfecta presa fácil de un par de vampiros ridículamente atract...