introducción

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luke hemmings, dueño de una gran empresa importante en los ángeles, california. enfermo del dinero, codicioso hasta ya no poder. tenía a todos comiendo de la palma de su mano, incluso a su novio, michael clifford, rehén de sus maltratos que según luke definía como "muestras de amor", llevaba a michael a todos lados, a cada viaje que hacía, a cada cena de negocios, a cada mínimo acontecimiento. no lo hacía porque fueran una pareja normal y quisiera tener a su pareja con el, si no que luke lo necesitaba para entretenerse, ya sea por el sexo, porque disfrutaba hacerlo entender que era de el y solo de el, le gustaba abusar de la inocencia de michael, haciéndole creer que es amor lo que demuestra cuando es todo lo contrario, alguna especie de fetiche tal vez, el caso es que lo disfrutaba. le gustaba ver como michael estaba para el en todo sentido. un chasquido de dedos y el teñido ya se encontraba a sus pies, era un muy buen sumiso, le daba todo lo que pedía.

pero michael tenía días donde se cansaba de escuchar que amarlo no era suficiente según luke, pero era la única razón por la que soportaba las cosas que a luke se le antojase hacer con el, a pesar de que sus glúteos quedaran rojos y ardiente de los fuertes azotes que recibía, los golpes que se sentían como besos según michael.
luke tenía sus días de actuar como el buen novio y sincero, sin maltratos ni palabras que apuñalan peor que un arma, pero no le duraba mucho, michael no iba a olvidar que tenía dueño y era luke, y que sin esos gestos horribles no sería lo que según luke, era amor.

ultraviolencê; mukeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora