1: Los que observan

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Llegue al colegio un poco temprano, como de costumbre, ya que quería ver qué aula nos había tocado esta vez y escoger los mejores asientos para mí y mis amigos. Atravesé el patio de la escuela y subí al segundo piso para encontrarme con la oficina de la señorita Mina, que en ese momento estaba dándole una explicación a un chico de nuevo ingreso.

-Si mira, bajando las escaleras vas a encontrar una jardinera con flores lilas, doblas a la derecha y sigues recto, allí es donde se encuentra el aula 10, cariño, ¡Pero corre ya! Que tu primera hora empieza en menos de 5 minutos.

El chico salió corriendo, sin mirar atrás y esperando que su cerebro no se hubiera confundido con la no tan buena explicación de la señorita Mina.

-Vaya que me recuerda a mí, en la primera vez que pisé este colegio, he.

Dije, todavía desde las escaleras. En ese momento la señorita Mina me volteo a ver y soltó un grito de película.

- ¡LA HIJA PRÓDIGA A REGRESADO!, Valeria, que gusto verte después de tanto tiempo, ni un mensajito tuyo en vacaciones o un e-mail. Lo tomare en cuenta en el momento de escoger el nombre del primer lugar para el cuadro de honor de este semestre.

La señorita Mina, era la encargada de la administración de los papeles importantes de la escuela, además debía estar al tanto de las calificaciones y el rendimiento escolar de todos los alumnos, por ende, ella se encargaba del cuadro de honor de cada semestre,una que otra vez era la guía de turistas de la escuela y en algunas ocasiones, era una amiga mas a la cual contarle mis problemas o aventuras.

-Lo siento muchísimo, pero todas las mañanas estaba ocupada ayudando a mamá con los quehaceres y en las tardes servía hamburguesas en el negocio de mi padre. Para el final del día terminaba con los pies adoloridos, con olor a grasa de cocina y lo único que me apetecía en ese momento era tomar un baño y tirarme a la cama.

- Y yo decía que mis vacaciones habían sido terribles jajaja, pero bueno Val tienes que ir a clase ¿no?, si nos encontramos en algún receso ya me terminarás de contar tu gran aventura en McDonald's.

La señorita Mina, a pesar de todo, nunca perdía su gran buen humor.

-Claro que, si Mina, ya te lo terminaré de contar más tarde. Solo una preguntota ¿Sabes que aula me toca ahora?

Después de unos segundos de tomar papeles al azar y revisar grupos equivocados, ella dijo.

-Pero si te toca el aula 6, pequeña, ¡Que suerte tienes!, es la que está por la cancha de fútbol, es el aula mas equipada de este semestre, además super amplia y al lado de ella está la máquina de chucherías.

Ya sabía cuál era el aula 6, sería raro ir en último año y no saber que esa aula era una de las mejores del colegio.

-Uf, espero y que mis compañeros puedan poner atención en clase, con tantas distracciones acechandolos. Bueno iré a esperar a mis amigos en la entrada, muchas gracias Mina.

No sé si me habrá escuchado por completo, ya que fui bajando las escaleras poco a poco mientras terminaba de hablar.

Corrí por el patio, hasta la entrada, llegando allí, ya había alguien más esperándome.

- ¿Qué pasa? ¿Qué tal las vacaciones? ¿Cuánto me extrañaste preciosa?

Dijo Ismael, mientras terminaba de anotar su nombre en la libreta de reportes, ya que, como todos los primeros días de clase, llevaba sus gafas de sol y una playera color blanca como sustituta de la camisa escolar.

- ¿En serio que se te ha olvidado lavar la camisa de nuevo, Isma, por cuarta vez consecutiva?

-Es el primer día y ya tienes preparado para mi un reclamo, ¡Si que vamos a empezar con buen pie este semestre!

Caminos IncorrectosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora