Carta 3: "La cacería de brujas"

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 Ella...

Era solamente ella...

No sé si es mi culpa por su desaparición o la suerte no nos bendice a todos...

Todos mis recuerdos de esa noche navegan por el mar más triste de las mentiras en búsqueda de la verdad...

Mis recuerdos son como las pistas de un asesinato macabro...

Quisiera volver a vivir esa noche una y otra vez para tratar de saber algo...

Pero es imposible.

Miraba a todos lados, sentía el ambiente de silencio que se producía en el salón, como sí algo crudo y grave hubiera pasado.

— Como les decía chicos – se levantó aquel hombre y se aferró al pizarrón con el plumón en la mano. – Para sacar la estadística aquí...

— Buenos días – llegó el director con una cara triste, todos respondieron al saludo – puede convocar a todos sus alumnos al patio. Tenemos un anuncio importante que hacerles. – La desaparición de Aurora.

— Por supuesto – respondió – vamos muchachos.

...

— Hace alrededor de dos semanas – decía el director con voz temblorosa mientras sujetaba el micrófono y nosotros estábamos formados como sardinas. – La joven Aurora Smith del 5°E desapareció sin dejar rastro un sábado. Por ello necesitamos que si saben algo de su paradero nos busquen o bien si quieren ayudar a la búsqueda pueden unirse a las brigadas con los policías.

— Esto sí que es serio – dijo Maxon.

— Repito. Necesitamos su ayuda cooperativa, así mismo, dentro de unos días haremos un toque de queda en honor a Aurora, un pequeño altar con todo lo que a ella le gustaba, también, si quieren dedicarle una canción, poema, o algo parecido pasen con sus maestros de literatura o artes para apoyo. Ahora, por lo pronto, le brindaremos un minuto de silencio. – El patio se lleno de silencio, nadie decía ni una sola palabra, sólo se podía apreciar el ruido de los pájaros y de las ramas de los arboles que decoraban al patio. Sentía el peso de la culpa por no recordar nada de lo que pasó esa noche, estaba tan tomado que ni siquiera recuerdo si estuvo allí, ni nada. Emma debe saber algo de ello. Debe saber algo. – Gracias por su silencio que le sirve de tributo a Aurora, pueden regresar a sus salones.

...

— Vaya esto si es serio – dijo Maxon – brigadas para buscar a una chica.

— Pobre de la mamá de Aurora – comentó Sara – debe estar destrozada.

— Da igual de lo que le haya pasado a la Buha – apeló Emma – se lo merece.

— Cállate – dije enojado – parece que estas alegre que haya desaparecido.

— Por supuesto que estoy alegre, ¿no recuerdas querido Daniel lo que la Buha nos hizo?

— No le digas Buha – la regañé.

— ¿Lo recuerdas o no? – volvió a cuestionar Emma – no estas molesto porque a ti no te hizo nada.

— Cállate Emma – reprimió Alex. - Nos lo merecemos.

— ¿Qué? – dijo impresionada Emma – Sara – la chica con los ojos azules volteo con la mirada culpable – te corrieron de competición de porras porque te delató. Maxon – el volteó – te hicieron memes hasta morir. Y Alex, terminaste con tu novia por su culpa.

DesaparecidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora